Las frutas son consideradas uno de los alimentos más beneficios y positivos para el cuerpo, debido a los efectos que tiene en cuestiones de salud. Estos productos naturales sobresalen por sus sabores y sus texturas, dándole frescura a las comidas y preparaciones.
En la extensa lista de opciones que hay en el mercado, hay una que posee distintos aportes buenos para el organismo en temas digestivos. Se trata de la guayaba, la cual se caracteriza por sus múltiples propiedades, además de su aroma y sabor dulce.
La guayaba es una fruta querida por muchos y odiada por otros, pero lo cierto es que es rica en fibras, antioxidantes y otros nutrientes, como vitamina A, B y C, ayudando a mejorar la salud en general, según el portal portugués de salud, nutrición y bienestar, Tua Saúde. Asimismo, tiene propiedades antioxidantes, antidiabéticas, antihipertensivas, antiinflamatorias, analgésicas, hipocolesterolémicas, antiespasmódicas, antimicrobianas y astringentes.
Este producto, además de utilizarse para muchas preparaciones, destaca por cuatro puntos claves que tiene en el cuerpo. Su trabajo va dirigido al funcionamiento del estómago, además de que puede ser un aliado para quienes buscan perder peso de forma natural.
Tua Saúde enumeró algunas contribuciones que hace este alimento si se incluye en las dietas o rutinas diarias, ayudando más de lo que se cree.
Favorecer la pérdida de peso
De acuerdo con lo mencionado por el portal especializado, la guayaba “es rica en pectina, un tipo de fibra que favorece la sensación de saciedad, disminuyendo naturalmente el hambre”. Esta característica puede evitar el consumo constante de alimentos que podrían generar daños por sus componentes.
Beneficio para la digestión
De igual manera, “la guayaba es una fruta rica en fibras, las cuales estimulan los movimientos intestinales, ayudando a prevenir el estreñimiento”. Si bien se sabe, este producto es utilizado para estabilizar el funcionamiento del organismo, precisamente cuando se afecta por algún malestar o pesadez.
Aumentar las defensas del organismo
Tua Saúde puntualiza también que “la guayaba es una de las frutas más ricas en vitamina C, un nutriente que ayuda a aumentar las células de defensa del organismo, mejorando el sistema inmunológico”.
Mejorar la diarrea
En cuestión a los problemas estomacales, esta fruta es un beneficio constante para que el organismo se estabilice. “Algunos estudios científicos indican que extracto de las hojas de guayaba posee propiedades astringentes, antiespasmódicas y antimicrobianas, que ayudan a disminuir tanto la diarrea (aguda o crónica), el dolor abdominal y los posibles microorganismos causantes de la misma, pudiendo ser ingerida en forma de té”.
¿Qué pasa si se toma jugo de guayaba todos los días?
El diario La Nación alude a un estudio difundido por The American Journal of Cardiology para destacar su contribución en el corazón. En el análisis se encontró que los pacientes participantes tuvieron una reducción tanto a nivel de colesterol como triglicéridos después de estar aproximadamente tres meses bajo monitoreo.
Por su parte, HealthLine la incluye en la lista de alimentos más saludables al incluir otros componentes como manganeso, folato, cobre y potasio. A nivel antioxidante podría resultar benéfica para las células y disminuir el riesgo de padecimientos crónicos; además de ser una fuente de pectina, es decir, un tipo de fibra que ayuda en la salud intestinal (y podría favorecer la lucha tanto contra el estreñimiento como la diarrea).
La Nación subraya el jugo de guayaba también para mejorar la apariencia de la piel, de acuerdo con lo expuesto por Naturo Press. Lo anterior por su contenido en betacarotenos y flavonoides que contrarrestan el envejecimiento prematuro. Ese es justamente uno de los potenciales de consumir esa bebida todos los días: el hecho de retrasar la aparición de arrugas como consecuencia de la exposición solar.
De acuerdo con el medio ya mencionado, otra ventaja se vincula con el equilibrio del peso al ser una fruta con baja carga calórica y una contribución para que el cuerpo llegue a la saciedad más rápido, y así sea menor la posibilidad de ingerir comida adicional, aparte de las principales o meriendas (que no es recomendable omitirlas).