Para hablar de los efectos que tiene el tamarindo para ayudar a cuidar los ojos, regular la diabetes y los niveles de colesterol malo en el organismo es importante destacar las propiedades de esta fruta y, sobre todo, explicar algunas características propias de las afecciones nombradas anteriormente.
En este sentido, Mayo Clinic destaca que “el colesterol es una sustancia cerosa que se encuentra en la sangre. El cuerpo necesita colesterol para formar células sanas, pero tener altos niveles de colesterol puede aumentar el riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca”.
Asimismo, el portal afirma que “con el colesterol alto, es posible que se te formen depósitos grasos en los vasos sanguíneos. Con el tiempo, estos depósitos crecen y hacen que sea más difícil que fluya suficiente sangre a través de las arterias. A veces, esos depósitos pueden romperse de repente y formar un coágulo que causa un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular”.
Por otra parte, es importante recalcar que la diabetes es una enfermedad crónica que afecta al modo en que el organismo transforma los alimentos en energía.
Dicho eso, el cuerpo descompone los alimentos en azúcar y la libera en el torrente sanguíneo. Cuando sube el azúcar en sangre, el páncreas libera insulina, para que la glucosa se transforme en energía.
Entonces, la diabetes se da cuando el cuerpo no produce suficiente insulina y queda demasiada azúcar en el torrente sanguíneo. Con el tiempo, esto puede provocar graves problemas de salud, como cardiopatías, pérdida de visión y enfermedades renales.
Allí, en medio de esta ecuación hay una fruta que juega un papel muy importante. El tamarindo es un tipo de fruta tropical que procede del árbol del tamarindo, originario de África, pero que también crece en otras regiones tropicales, incluida la India. El tamarindo produce vainas parecidas a judías que contienen semillas y una pulpa fibrosa. Al madurar, la pulpa se vuelve pastosa y adquiere un sabor agridulce.
El tamarindo es probablemente más conocido por su uso en platos asiáticos, mexicanos y caribeños, y suele comprarse en forma de pasta o puré, pero también puede adquirirse en vainas crudas, en bloque prensado y como concentrado de tamarindo.
Propiedades del tamarindo
- Mejorar la salud del corazón y el colesterol: Al ser rico en polifenoles y flavonoides, se ha demostrado que el tamarindo disminuye el colesterol LDL y aumenta el colesterol HDL, reduciendo así el riesgo de aterosclerosis. También se ha descubierto que la pulpa seca tiene efectos antihipertensivos, reduciendo la presión arterial diastólica.
- Tener efectos antidiabéticos: Se ha demostrado que el efecto antiinflamatorio del extracto de semilla de tamarindo ofrece posibles beneficios protectores y mejora la regulación del azúcar en sangre en los diabéticos.
- Ayuda a la salud visual: Se usa para curar o aliviar la conjuntivitis, al igual que con las semillas de este fruto se preparan gotas que alivian la resequedad ocular.
- Una rica fuente de antioxidantes: La pulpa del tamarindo es rica en numerosos fitonutrientes que actúan como potentes antioxidantes dietéticos y pueden aumentar la eficacia de las defensas inmunitarias naturales del organismo. Los antioxidantes son necesarios para reducir el impacto inflamatorio del estrés oxidativo.
- Propiedades anticancerígenas: En un estudio realizado en animales en 2014, el extracto de semilla de tamarindo redujo tanto los marcadores de estrés oxidativo como retrasó el avance del carcinoma de células renales. Esto se debe a su efecto antioxidante, y a que el extracto de semilla de tamarindo tiene propiedades de inducción de enzimas antioxidantes y efecto de bloqueo de vías de señales relacionadas con el cáncer.
Cabe recordar que la información suministrada en el contenido anterior no sustituye la asesoría médica y lo mejor que puede es hacer consultar a un experto de la salud.