El cuerpo humano depende en gran medida del sistema circulatorio como soporte vital, y apoyo para la realización de múltiples actividades durante el día a día, este contando con el corazón como pilar central de su funcionamiento, es uno de los aspectos de la salud que requieren mayor cuidado de forma específica.

A partir de las actividades realizadas por este sistema, el torrente sanguíneo se encarga de transportar por el cuerpo humano distintos componentes, vitaminas, minerales y propiedades, las cuales permiten que el organismo se nutra y potencie sus capacidades.

Dentro de esta corriente sanguínea, participan distintas sustancias, las cuales deben estar en un nivel concreto para evitar afectaciones a la salud, y que de esta manera la circulación se vea facilitada a través de las venas y las arterias.

Entre los elementos más reconocidos presentes en la sangre, resaltan el colesterol y la glucosa, los cuales en caso de presentar un desequilibrio, pueden generar enfermedades o accidentes cardiovasculares que pongan en grave riesgo la vida humana.

La alimentación es clave para controlar los niveles de glucosa en la sangre. | Foto: Getty Images

En el caso puntual de la glucosa, tener un nivel descontrolado de esta en sangre puede acabar generando afectaciones mayores y de mayor gravedad, como lo puede ser la diabetes mellitus, según reseña el portal Mayo Clinic.

“La diabetes mellitus se refiere a un grupo de enfermedades que afecta la forma en que el cuerpo utiliza la glucosa en la sangre. La glucosa es una importante fuente de energía para las células que forman los músculos y tejidos. También es la principal fuente de combustible del cerebro”, asegura el portal.

La diabetes tipo 2 es la más común. | Foto: Getty Images

Es por esto que es de gran importancia mantener un nivel controlado de este compuesto en la sangre, tarea en la cual, la alimentación juega un papel clave, siendo de gran necesidad generar un hábito de dieta rica y balanceada, con el objetivo de evitar estas complicaciones.

A partir de esto, existen ciertos alimentos puntuales que son recomendados para controlar el nivel de glucosa en la sangre, mientras que hay otros que deben ser totalmente evitados, mayormente por su aporte en azúcares al organismo. Uno de ellos es el orégano, la cual se encuentra dentro de una de las hierbas más empleadas en la mayoría de los hogares, gracias a su aroma, frescura y versatilidad a la hora de preparar diferentes platos como pizzas, ensaladas y guisos de pescado o verduras.

Una poderosa fusión de dos ingredientes que, en conjunto, cuenta con grandes propiedades para la salud. | Foto: Getty Images

Sin embargo, pocos conocen sus beneficios para la salud. En concreto, esta planta es fuente de vitaminas como la A, C, E y K, además de ser rica en fibra y minerales como hierro, magnesio y potasio. También contiene ácido fólico y calcio, según el magacín Mundo Deportivo, en su sección de salud y bienestar.

Es ideal para ayudar a reducir los niveles de azúcar en la sangre. De acuerdo con un estudio del Departamento de Bioquímica de la Universidad de Kerala, en Indiana, el orégano puede ser una gran opción para disminuir la glucosa o azúcar en el organismo.

El orégano no solo se puede utilizar para dar aroma y sabor a los platos, sino también se puede preparar una infusión con la planta y para hacerlo en un litro de agua hirviendo se debe poner la cantidad equivalente a un puño de hojas de orégano, se deja reposar por tres minutos y se retira del fuego. Enseguida, se esperan cinco minutos y se cuela para retirar las hojas de orégano. Finalmente, se sirve y para endulzar se puede agregar un poco de miel.

Hay que señalar que muchas personas creen que usar plantas para tratar una enfermedad es más seguro que tomar un medicamento. De hecho, las personas han estado empleando plantas en medicina popular durante cientos de años. Por lo tanto, es fácil ver el atractivo.

Las plantas medicinales ofrecen diversos beneficios de salud al organismo. | Foto: ivstiv/Getty Images

Sin embargo, “natural” no quiere decir seguro, a menos que se tomen de la manera indicada, algunas hierbas pueden interactuar con otros medicamentos o ser tóxicas en dosis altas. También, pueden causar efectos secundarios.

Por tal razón, antes de consumir la planta, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique lo que es más adecuado para cada persona.

Debido a la pandemia por Covid-19, los profesionales de la salud cuentan con bastante oferta en el viejo continente. | Foto: Getty Images / Thomas Tolstrup

¿Cómo se prepara el té de orégano?

En un litro de agua hirviendo se debe poner la cantidad equivalente a un puño de hojas de orégano, se deja reposar por tres minutos y se retira del fuego. En seguida, se esperan cinco minutos y se cuela para retirar las hojas de orégano. Finalmente, se sirve y para endulzar se puede agregar un poco de miel.

Además, el portal de ejercicio, bienestar y nutrición, Salud 180, recomendó consumir una taza de té de orégano en la mañana y otra en la noche para obtener todos los beneficios de esta planta.

Las infusiones naturales sirven como desintoxicantes o depuradores para el cuerpo. | Foto: Getty Images

No obstante, el orégano no es recomendado en casos como:

  • Embarazo: Es posible que el orégano no sea seguro cuando se toma por vía oral en cantidades medicinales durante el embarazo. Existe la preocupación de que la ingesta de orégano en cantidades superiores a las de los alimentos pueda provocar un aborto espontáneo.
  • Lactancia: No hay suficiente información confiable para saber si es seguro usar grandes cantidades de orégano durante la lactancia.
La alimentación es clave en la etapa de lactancia. | Foto: Getty Images
  • Alergias: El orégano puede causar reacciones en personas alérgicas a las plantas de la familia Lamiaceae, como albahaca, hisopo, lavanda, mejorana, menta y salvia.
  • Cirugía: Grandes dosis de orégano pueden aumentar el riesgo de hemorragia. Las personas que usan grandes dosis de orégano deben dejar de tomarlo 2 semanas antes de la cirugía.

De todos modos, antes de consumir algún alimento lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.

Té de orégano para combatir las infecciones respiratorias. | Foto: Kilito Chan

Información nutricional por 100 g de orégano

  • Energía: 418 kcal
  • Grasa: 10,3 g
  • Proteína: 11 g
  • Agua: 9,93 g
  • Vitamina E: 18,9 mg
  • Vitamina B3 (niacina): 6,2 mg
  • Vitamina B6: 1,04 mg
  • Vitamina B1 o tiamina: 0,17 mg
  • Vitamina B2 (riboflavina): 0,52 mg
plantas medicinales - hierbas medicinales | Foto: Getty Images
  • Vitamina A: 690 µg
  • Calcio1580: mg
  • Potasio: 1670 mg
  • Magnesio: 270 mg
  • Fósforo: 200 mg
  • Hierro: 44 mg
  • Sodio: 15 mg
  • Zinc: 4,4 mg
El orégano es fuente de vitaminas como la A, C, E y K, además de ser rica en fibra y minerales como hierro, magnesio y potasio. | Foto: Getty Images