Los triglicéridos son moléculas de grasa que se encuentran en la sangre, cuyo aumento y acumulación en el organismo se debe al exceso de alimentos ricos en azúcares, grasas y de bebidas alcohólicas.

Es muy común que las personas confundan los triglicéridos con el colesterol, sin embargo, aunque son tipos de grasa similares, tienen funciones diferentes. Los primeros están encargados de almacenar las calorías no usadas por el organismo y además, le proporcionan energía al cuerpo. Por su parte, el colesterol ayuda a generar células y algunas hormonas, en especial.

Los triglicéridos son importantes en el mantenimiento de la salud, siempre y cuando sus niveles estén saturados por debajo de los 150 mg/dL. Getty Images. | Foto: Getty Images

Cuando se ingiere un alimento, los trigliceridos presentes son enviados al torrente sanguíneo para que sean aprovechados como energía, pero al consumirlos excesivamente, ellos se almacenan en el organismo en forma de grasa e incrementando el colesterol.

Al contar con unos niveles de trigliceridos elevados puede poner en riesgo la salud cardiaca. Por tal razón, es importante hacer cambios en los hábitos con el fin de garantizar bienestar.

Un plan de alimentación balanceado podría regular los niveles altos de triglicéridos, puesto que según la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (Medline Plus), si se queman menos calorías de las que se consumen, existe la posibilidad de desarrollar hipertrigliceridemia.

Los valores normales de ellos en la sangre deben estar por debajo de 150 mg/dL, a partir de esa cifra se considera que los lípidos se encuentran altos, pues al superar los 200 mg/dL debe acudir a un centro asistencial o realizar algunos esfuerzos para reducirlos.

Los triglicéridos se almacenan en el organismo en forma de grasa e incrementando el colesterol. | Foto: Getty Images

No obstante, las infusiones o los remedios naturales pueden ser una opción. Aunque debe tener en claro que es necesaria una dieta saludable, limitar el consumo de algunos alimentos y realizar ejercicio físico.

Infusiones para bajar los triglicéridos

  • Infusión de perejil: esta planta aromática contiene niacina, la cual favorece a la reducción de los lípidos y el colesterol. Pero al tomar este té debe ir acompañada de una dieta balanceada para que el efecto sea más rápido y duradero.

Para hacer su elaboración, solamente debe colocar a hervir un manojo de perejil en un litro de agua por unos cinco minutos, luego debe dejarlo reposar por 10 minutos y tomarse preferiblemente tres tazas al día.

Es necesario que tenga en cuenta que ni las mujeres embarazas, ni las personas con insuficiencia renal, ni los pacientes con cáculos renales deben consumir esta bebida. Pues contiene oxalato lo que puede perjudicar y a la vez favorecer a la producción de piedras en los riñones.

  • Infusión de alcachofa: es un excelente depurativo y diurético, ya que es rico en fibra y antioxidantes, lo que lo convierte en una buena opción para bajar los triglicéridos. Aunque, también se puede comer alcachofas varias veces a la semana.

Si lo desea en té, su preparación es sencilla, solo basta con poner a hervir las hojas de alcachofa fresca, pero si no las encuentra en las tiendas naturistas venden sus hojas secas. Con una cucharada por taza servirá para reducir la grasa retenida en el cuerpo.

Té de alcachofa, infusuón natural que ayuda a la buena digestión y reducir los triglicéridos. | Foto: Getty Images
  • Infusión de canela: esta rama disminuye los niveles de grasa en el organismo y beneficia la salud cardíaca. Para hacerla solo debe colocar a hervir agua con la canela y si desea, le añade un poco de miel. Es recomendable que consuma tres tazas diarias.

Infusión de ginkgo biloba: también reduce los niveles de colesterol y al igual que la anterior favorece la salud cardiaca. Su preparación es sencilla, solo debe colocar una cucharada de esta planta por cada taza de agua y tomarlo dos veces al día.

Se aconseja que estas personas no deben consumirla, las mujeres embarazas o lactantes, los individuos que consumen medicamentos antigulantes y los pacientes que sufren de epilépcia.