El laurel es conocido científicamente como Laurus nobilis perteneciente a la familia de las lauráceas, proveniente de un árbol ‘frondoso’ donde sus hojas suelen ser usadas generalmente en la gastronomía y la medicina, según la Fundación Española de la Nutrición (FEN).

Sus hojas secas suelen ayudar a exaltar mejor el sabor de otros alimentos cuando son añadidas a preparaciones como guisos, sin embargo, es importante tener presente que sus propiedades y compuestos se pueden obtener a través de infusiones, siempre y cuando su consumo sea regulado y consultado por un profesional de la salud.

La FEN menciona que los compuestos principales del laurel son hierro, potasio, vitamina A, riboflavina, niacina, calcio, magnesio, zinc, eugenol y cineol, por lo que se le considera una planta medicinal.

Cabe recordar que la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (MedlinePlus) explica que muchas son las hierbas medicinales que suelen ser usadas para aliviar síntomas de algunas enfermedades. Pero para la enciclopedia, no necesariamente son seguras, aunque sean naturales.

Las hojas de laurel le brindan diversos beneficios saludables al organismo. | Foto: Getty Images

Beneficios del laurel

De acuerdo con un artículo publicado por Tua Saúde y revisado por el enfermero Manuel Reis, las hojas de laurel se destacan por ser antifúngicas, antisépticas, antioxidantes e incluso expectorantes.

Por ejemplo, al estar compuesto de cineol tiene una propiedad antioxidante que neutraliza los radicales libres que dañan las células del cuerpo. Además, este efecto puede reducir el colesterol LDL que al ser considerado por la Clínica Mayo ‘una sustancia cerosa’ se acumula en las arterias e incita al desarrollo de problemas cardíacos.

Asimismo, su propiedad antiinflamatoria es útil para calmar síntomas producto de enfermedades como la artritis, que de acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) es una enfermedad que reúne más de 100 tipos de afecciones reumáticas, “siendo la artrosis la más común”. Es entonces que los síntomas más destacados son inflamación, dolor, rigidez, entre otros.

Consumir laurel puede ayudar a bajar los niveles de azúcar en la sangre. | Foto: Getty Images

Su acción expectorante también puede ser ideal para combatir afecciones respiratorias como los resfriados y la bronquitis porque según Tua Saúde elimina “el exceso de flema y mucosidad”.

En el caso del sistema urinario se supone que el laurel puede reducir el riesgo de cálculos renales, mismos que según el National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases “son trozos de un material sólido” que se forman tras la concentración de minerales en la orina.

Los principales síntomas que se destacan de esta afección son dolores intensos en la espalda y el abdomen, incluso algunas personas perciben sangre en su orina. “El dolor causado por un cálculo renal puede cambiar (...) a medida que se desplaza a través de las vías urinarias”, señala la Clínica Mayo.

Otros de los beneficios que se pueden encontrar del laurel para la salud del cuerpo, según el sitio web, es reducir el riesgo del desarrollo de enfermedades neurodegenerativas como el Parkinson y el Alzheimer, lo que no quiere decir que lo elimine.

Sus propiedades buenas para la salud pueden verse opacadas por los riesgos de consumirla inadecuadamente. | Foto: Getty Images

Pero, ¿qué le pasa a la sangre si se toma en exceso té de laurel?

El sitio web señala que el consumo de té de laurel puede regular el azúcar en la sangre, reduciendo el riesgo de diabetes, una enfermedad que para la Organización Mundial de la Salud (OMS) es metabólica y crónica que daña algunos órganos del cuerpo como los riñones y los ojos.

Dentro de los efectos que tiene el consumo excesivo de té de laurel sobre la sangre es que así como regula la glucosa, también la disminuye, incitando a una hipoglucemia, es decir, una afección en la cual los índices de azúcar en el torrente sanguíneo son muy bajos provocando dolores de cabeza, irritación, palpitaciones, sudoración, cansancio, entre otros.