Los triglicéridos son un tipo de grasa que se encuentra en la sangre. Cuando la persona come, el cuerpo convierte todas las calorías que no necesita usar en ese momento en el lípido y lo almacena en las células grasas, explica el instituto de investigación Mayo Clinic.
Si un individuo ingiere regularmente más calorías de las que quema, en particular de alimentos ricos en carbohidratos, es posible que tenga sus niveles de triglicéridos elevados, a lo que se le conoce como hipertrigliceridemia.
Cuando esto ocurre, probablemente se presente una enfermedad cardíaca. Según la mencionada institución, los triglicéridos altos pueden contribuir al endurecimiento de las arterias o al engrosamiento de las paredes arteriales (arterioesclerosis), lo que aumenta el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular, ataque cardíaco y cardiopatías.
La Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos indica que los factores que pueden subir los niveles de triglicéridos incluyen:
- Comer regularmente más calorías de las que se queman, especialmente si se consume mucho azúcar
- Tener sobrepeso u obesidad
- Fumar cigarrillos
- Consumir alcohol en exceso
- Ciertos medicamentos
- Algunos trastornos genéticos
- Enfermedades de la tiroides
- Diabetes tipo 2 mal controlada
- Enfermedades del hígado o renales
La alimentación juega un papel determinante en el comportamiento de este lípido en el cuerpo y por ello consumir muchas frutas, verduras, comida baja en grasas saturadas, cereales integrales y mantenerse muy hidratado son recomendaciones que brindan los especialistas para mantener esta grasa bajo control.
En caso de que sus niveles se hayan elevado, es posible recurrir a algunas alternativas caseras que ayudan a reducir este lípido y de esta forma cuidar la salud del corazón.
Avena y canela
El portal de salud Tua Saúde asegura que la avena contiene betaglucanos, un tipo de fibra soluble que ayuda a disminuir la absorción de grasas a nivel del intestino; mientras la canela es rica en antioxidantes, por lo que estos dos ingredientes favorecen la disminución de los triglicéridos y del colesterol.
Ingredientes:
- Media taza de avena en hojuelas
- Dos vasos de agua
- Una rama de canela.
Modo de preparación:
Mezclar las hojuelas de la avena con el agua y la canela, dejar reposar la mezcla durante la noche. Al día siguiente se debe colar y beber. Tomar todos los días, preferiblemente en ayunas. Con la canela también se puede preparar un té o agregarla en polvo en postres.
Té de alcachofa
Esta bebida aporta propiedades diuréticas y adelgazantes que estimulan la actividad metabólica para promover la pérdida de peso, clave para bajar los triglicéridos, precisa una publicación de la revista Mejor con Salud, escrita por Daniela Echeverri Castro. “Sus antioxidantes, fibra y minerales esenciales ayudan a reducir la acumulación de colesterol y triglicéridos, a la vez que disminuyen su absorción”, indica.
Ingredientes:
- Dos alcachofas.
- Tres tazas de agua (750 mililitros).
Modo de preparación:
- Se cortan las hojas de alcachofas y se ponen a hervir en una olla con agua.
- Se reduce el fuego y se dejan cocinar durante 10 minutos.
- Luego se retira, se deja reposar y se cuela el líquido antes de ingerirlo. Se puede tomar una taza de té antes de cada comida principal.
Remolacha y manzana
La remolacha es un vegetal con un alto contenido en fibras, al igual que la manzana, por lo que ambas ayudan a disminuir tanto los triglicéridos como el colesterol “malo”. Además, el limón también ayuda a eliminar y limpiar el organismo gracias a su alto contenido de vitaminas, minerales y antioxidantes.
Ingredientes:
- 50 gramos de remolacha
- Dos manzanas
- Jugo de un limón
- Un trozo pequeño de jengibre.
Modo de preparación:
Se pican la remolacha y las manzanas en trozos pequeños, se licúan todos los ingredientes y se bebe un vaso diario.
Té de diente de león
Esta planta aporta propiedades hipocolesterolémicas y antioxidantes, que ayudan a prevenir la formación o progresión de la aterosclerosis, que es la formación de placas en las paredes de las arterias. Tua Saúde indica que las investigaciones han comprobado que contribuye a evitar el daño oxidativo de las células y a disminuir los niveles de triglicéridos y de colesterol LDL (malo).
Ingredientes:
- Una o dos cucharitas de la raíz de diente de león triturada o en polvo
- Un vaso de agua
Modo de preparación:
Se pone el agua al fuego hasta que llegue a ebullición y luego se agrega sobre la raíz triturada y se deja reposar durante 10 minutos. Se cuela y se bebe tibio hasta tres veces al día. En caso de problemas gastrointestinales se debe consumir antes de las comidas.