Muchas personas en el mundo sufren de asma. Se trata de una afección en la que las vías respiratorias se estrechan e hinchan, lo que puede producir mayor mucosidad. Esto puede dificultar la respiración y provocar tos, un silbido al exhalar y falta de aire.
Si bien para algunas personas esta enfermedad puede ser una molestia menor, se puede convertir en un problema considerable que interfiere en las actividades cotidianas y que puede producir graves ataques de tos.
Según el Instituto Mayo Clinic, el asma no tiene cura, pero sus síntomas pueden controlarse. Dado que se trata de un padecimiento que suele cambiar con el tiempo, es importante trabajar de la mano con el médico para hacer un seguimiento de los signos y los síntomas y ajustar el tratamiento según sea necesario.
Los síntomas de esta enfermedad pueden variar según la persona. Es posible que se presenten ataques de asma con poca frecuencia, síntomas solamente en ciertos momentos, como cuando el paciente realiza ejercicio, o síntomas en todo momento.
Los signos más evidentes que se registran cuando una persona tiene asma está relacionados con la falta de aire, dolor u opresión del pecho, sibilancias al exhalar (es un signo común de asma en los niños), problemas para dormir causados por falta de aliento, tos o sibilancia al respirar o tos similar a la que se presenta cuando hay un resfriado o gripe
Cuando el padecimiento empieza a empeorar, los signos y síntomas del asma son más frecuentes y molestos, hay mayor dificultad para respirar e incluso existe la necesidad de usar un inhalador de alivio rápido con mayor frecuencia.
Cuando se presenta un asma severa y los medicamentos regulares no proporcionan el alivio que la persona requiere es posible acudir a algunos remedios naturales pueden aliviar los síntomas, reducir la cantidad de medicamentos que requiere tomar y mejorar la calidad de tu vida en general. Estos remedios funcionan mejor cuando se toman junto con tus medicamentos recetados para el asma.
El portal especializado Healthline recomienda algunos de ellos:
1. Cambios en la dieta: Aunque no existe una dieta específica para las personas con asma severa, hay algunos pasos que se pueden seguir para ayudar a mejorar los síntomas. En muchos casos, tener sobrepeso puede empeorar el asma severa. Es importante mantener una dieta saludable y equilibrada, lo cual incluye abundantes frutas y vegetales. Estas son buenas fuentes de antioxidantes como el beta caroteno y las vitaminas C y E, y pueden ayudar a reducir la inflamación de las vías respiratorias.
2. Técnica de respiración Buteyko: Es un sistema de ejercicios de respiración. Puede ayudar a reducir los síntomas del asma a través de la respiración lenta y suave. Consiste en exhalar por la nariz en lugar de la boca. Exhalar por la boca puede secar tus vías respiratorias y hacerlas más sensibles. Algunas personas pueden experimentar menos infecciones respiratorias al usar esta técnica. Otras que practican la BBT consideran que ayuda a elevar sus niveles de dióxido de carbono.
3. Ajo: El ajo tiene varios beneficios para la salud, incluyendo propiedades antiinflamatorias. Debido a que el asma es una enfermedad inflamatoria, el ajo puede ayudar a aliviar tus síntomas. Aun así, no existe evidencia concluyente de que sea efectivo para prevenir las recaídas del asma.
4. Jengibre: El jengibre es otra hierba que contiene propiedades antiinflamatorias y puede ayudar con el asma severa. Un estudio de 2013 demostró que los suplementos orales de jengibre estaban relacionados a una mejora en los síntomas del asma. Sin embargo, no confirmó que el jengibre mejorara la función general de los pulmones.
5. Miel: La miel se usa frecuentemente en los remedios para la gripe para ayudar a aliviar la garganta y reducir la tos. Se puede mezclar miel con una bebida caliente como el té de hierbas para aliviar los síntomas.
6. Aceites omega 3: Se ha demostrado que los aceites omega 3, que se pueden encontrar en el pescado y semillas de linaza, tienen muchos beneficios para la salud. También pueden disminuir la inflamación de las vías respiratorias y mejorar la función de los pulmones en personas con asma severa. Sin embargo, dosis altas de esteroides orales pueden bloquear los efectos benéficos de los aceites omega 3.
7. Cafeína: La cafeína es un broncodilatador y puede reducir la fatiga del músculo respiratorio. Puede mejorar la función de las vías respiratorias por hasta cuatro horas después de consumirla.
8. Yoga: El yoga incluye ejercicios de estiramiento y respiración para ayudar a mejorar la flexibilidad y la condición física general. Para muchas personas, practicar yoga puede disminuir el estrés, que puede detonar el asma. Las técnicas de respiración utilizadas en yoga también pueden ayudar a reducir la frecuencia de los ataques de asma. Sin embargo, no existe ninguna evidencia concluyente que lo compruebe.
9. Hipnoterapia: En la hipnoterapia, se usa hipnosis para que la persona se sienta más relajada y anuente a nuevas formas de pensamiento, sentimiento y comportamiento. La hipnoterapia puede facilitar el relajamiento de los músculos, lo cual puede ayudar a las personas con asma a enfrentar síntomas como presión en el pecho.
10. Acupuntura: La acupuntura es una forma de la medicina antigua china que consiste en colocar pequeñas agujas en puntos específicos del cuerpo. Todavía no se han comprobado los beneficios a largo plazo de la acupuntura contra el asma. Algunas personas con asma consideran que la acupuntura ayuda a mejorar el flujo de aire y a manejar los síntomas como dolor de pecho.
De acuerdo con los especialistas, es posible que algunos de estos remedios naturales ayuden a reducir los síntomas del asma. Sin embargo, lo recomendable es continuar con los medicamentos recetados por el médico. Además, muchos de estos tienen evidencia limitada o no tienen evidencia de funcionar para el asma. Es importante consultar al especialista antes de adoptar remedios complementarios.