Es probable que por lo menos una vez en la vida las personas experimenten dolor de cabeza. Si este se presenta de manera esporádica, no hay de qué preocuparse, pero si el dolor persiste y se siente todos los días, puede que sea crónico. En ese último caso, es pertinente acudir al médico pronto.

“En vez de un tipo específico de dolor de cabeza, los dolores de cabeza crónicos diarios comprenden una variedad de subtipos de dolor de cabeza. «Crónico» se refiere a la frecuencia con la que ocurren los dolores de cabeza y el tiempo que dura la afección”, explica Mayo Clinic.

El dolor de cabeza crónico es uno de lo más incapacitantes, según la entidad sin ánimo de lucro. Destaca, además, que con la ayuda de un tratamiento médico agresivo y un control constante a largo plazo se puede disminuir la intensidad del dolor y la frecuencia.

Para saber si alguien padece de un dolor de cabeza crónico, se debe tener en cuenta que este diagnóstico se da cuando se sufre de dolores de cabeza por 15 días o más durante el mes y perdura por más de tres meses. Es importante señalar que hay dolores de cabeza crónicos diarios que pueden ser de corta duración o de larga duración –cuando persisten por más de cuatro horas–.

La migraña crónica, el dolor de cabeza crónico de tipo tensional, el dolor de cabeza crónico diario y la hemicránea continua son algunos ejemplos. Mayo Clinic los define de la siguiente manera:

Barcelona Mujer en casa | Foto: derechos de autor no

Migraña crónica

Este tipo de migraña se presenta sobre todo en personas con antecedentes de migrañas episódicas. Entre las características que destacan en esta migraña es que afectan uno o ambos lados de la cabeza, producen una sensación pulsátil y causan dolor moderado a intenso. Náuseas, vómitos o ambos y sensibilidad a la luz y al sonido son algunos de los síntomas que las provocan.

Dolor de cabeza crónico de tipo tensional

Por lo general, estos dolores de cabeza afectan ambos lados de la cabeza, causan dolor leve a moderado y causan dolor que se siente como una presión o tensión, pero no es pulsátil, reseña Mayo Clinic.

Dolor de cabeza crónico diario

“Estos dolores de cabeza aparecen de manera súbita y, por lo general, se presentan en personas sin antecedentes de dolor de cabeza. A partir del tercer día del primer dolor de cabeza, se vuelven constantes”, destaca la entidad sin ánimo de lucro. De acuerdo con Mayo Clinic estos dolores causan dolor leve a moderado o un dolor que se siente como una presión o tensión, pero no son pulsátiles, afectan con frecuencia a los dos lados de la cabeza y pueden tener características similares a la migraña crónica o al dolor de cabeza crónico de tipo tensional.

Hemicránea continua

Ojos enrojecidos y llorosos del lado afectado, sensación de desasosiego, congestión nasal o catarro y caída del párpado o estrechamiento de la pupila son algunas de las características que se presentan en los pacientes que sufren de hemicránea continua. Estos dolores de cabeza son diarios y continuos, sin períodos sin dolor, pueden volverse intensos con la presencia de síntomas parecidos a la migraña, afectan un solo lado de la cabeza, causan dolor moderado con aumentos súbitos de dolor intenso y, según Mayo Clinic, responden al analgésico indometacina (Indocin), de venta bajo receta.

La entidad sin ánimo de lucro destaca que las personas deben estar alerta ante las señales que dan los dolores de cabeza y consultar al médico cuando se padezcan dos o más dolores de cabeza por semana, el patrón del dolor de cabeza cambia o los dolores de cabeza empeoran, son incapacitantes –no dejan trabajar o hacer alguna actividad–, se debe tomar un analgésico para los dolores de cabeza la mayoría de los días o cuando se necesita de una dosis mayor de analgésicos de venta libre que la dosis recomendada para aliviar el dolor.

Sumado a lo anterior, Mayo Clinic también sugiere que si el dolor de cabeza posee alguna de las siguientes características es importante buscar la ayuda de un especialista: es repentino e intenso, aparece después de una lesión en la cabeza, empeora a pesar de descansar y tomar analgésicos o está acompañado de fiebre, rigidez en el cuello, desorientación, convulsiones, visión doble, debilidad, entumecimiento o dificultad para hablar.