La higiene bucal es primordial para el organismo, pues a través de la boca pueden entrar miles de gérmenes al cuerpo y mucho de ellos se quedan vivir allí, desencadenando, en el futuro, algunas molestias que afectan al sistema digestivo o que simplemente deterioran la salud de sus dientes o lengua. Por eso, es crucial saber cada cuánto y cómo limpiar el cepillo de dientes que se usa a diario.
Para evitar este triste desenlace es clave cepillarse después de cada comida y utilizar enjuagues bucales que ayuden a llegar a donde el cepillo no lo logra; sin embargo, después de acabar con esta rutina, es clave tener presente que hay que lavar, muy bien, los utensilios que se emplearon en ella.
El más importante, seguramente, es el cepillo de dientes, por lo que la Asociación Dental Americana (ADA) entregó algunas recomendaciones luego de confirmar que allí se quedan a vivir un sinnúmero de bacterias después de cada uso.
Aunque no se confirma que afecten a la salud, los expertos sí han certificado que pueden llegar al organismo a través de una llaga o una pequeña herida en la boca, lo que sí representaría ciertos riesgos.
¿Cómo limpiar el cepillo de dientes?
Es un hábito que tiene que practicarlo después de cada uso sin importar si es un cepillo manual o uno eléctrico.
- Lo primero que debe hacer es lavarlo con el agua caliente que sale del grifo; asegúrese de que el líquido fluya entre las cerdas y límpielo quitando todos los residuos de comida o pasta de dientes que estén allí. Es clave que el agua esté caliente.
- Cuando termine este paso debe secarlo sin dejar rastro de humedad. Utilice toallas de papel para que el mango quede totalmente seco.
- Por último, para que las cerdas sequen de la manera correcta, colóquelo de pie en algún recipiente y sin cubrirlas. Otros especialistas recomiendan que lo acueste sobre algo, pero dejando las cerdas al aire para que escurran el agua que quedó en ellas.
Se ha conocido de personas que recomiendan un paso extra como la desinfección del cepillo con agua oxigenada o rayos ultravioleta; sin embargo, la ADA no considera que esto sea necesario y asegura que con el agua caliente es más que suficiente para eliminar las bacterias que se alojan allí.
Recuerde, además, que el cepillo se debe cambiar cada tres o cuatro meses.
Consejos para cepillar los dientes antes de dormir
- Lo ideal es tener un cepillo de dientes en un cajón junto a la cama. No siempre se necesita pasta de dientes, con tan solo pasar el cepillarse la boca y hacerlo de la forma correcta es suficiente.
- Es crucial tener un cepillo de dientes que se adapte a las necesidades de cada persona. Por ello, existen cepillos en versión eléctrica o manuales.
- Se aconsejan cepillarse los dientes por lo menos durante dos minutos. Aunque la noche se puede tornarse difícil debido al cansancio, es importante mantener este saludable hábito durante este tipo para eliminar todas las bacterias que se alojan en la boca.
- Al igual que el cepillo de dientes, es fundamental mantener el hilo dental cerca de la cama. De hecho, se puede utilizar cuando la persona esté acostada y elimine el resto de bacterias que se acumulan entre los dientes.
- Otro útil consejo es pasar la lengua por los dientes para eliminar el exceso de placa. Cabe mencionar que la placa es como un alojamiento libre para las bacterias y conlleva a producir caries o enfermedades en las encías.
- No se debe restregar fuertemente los dientes. Lo ideal es aplastar las cerdas con regularidad y hacerlo con toques suaves para evitar dañar el esmalte de los dientes y las encías.
- Aunque los dientes se pueden cepillar sin pasta dental, lo mejor para la salud bucodental es hacerlo con una pasta de dientes con flúor y llevar a cabo los correspondientes enjuagues para eliminar los ácidos de los alimentos.