Si está buscando perder peso y las dietas no son la opción preferida, existe un truco que no requiere esfuerzo adicional, es efectivo para la pérdida de peso y no implica una gran inversión económica.

El truco consiste en desarrollar el hábito de beber agua antes y entre las comidas. Aunque puede parecer un mito, en realidad funciona para adelgazar. “Beber agua tiene el beneficio de quemar calorías, ya que acelera el metabolismo”, según indica un estudio publicado en la Biblioteca Nacional de Medicina.

Diversas investigaciones han demostrado que el gasto energético en reposo, es decir, la cantidad de calorías quemadas mientras estamos en reposo, se incrementa entre un 24% y un 30% en los diez minutos posteriores al consumo de agua. Este efecto se mantiene durante aproximadamente una hora.

Los vasos sanguíneos y arterias pueden taponarse por sustancias como el colesterol. | Foto: Getty Images

En concreto, beber medio litro de agua puede quemar exactamente 23 calorías. Esto significa que si la persona consume esta cantidad de agua al día durante un año, estará quemando alrededor de 17,000 calorías, lo que equivale a perder 2 kilos de grasa solo con este pequeño hábito diario.

Además, si bebe agua fría, el efecto adelgazante se potencia, ya que el cuerpo necesita gastar más energía para calentar el agua a la temperatura corporal. En resumen, beber agua antes y entre las comidas puede resultar beneficioso para la pérdida de peso, y si el agua es fría, se intensifica aún más este efecto.

¿Cuánta agua hay que beber al día para adelgazar rápido y acelerar el metabolismo?

El mito de que las personas deben beber dos litros de agua al día no es cierto. De hecho, consumir solo medio litro de agua diariamente puede ayudar a perder peso sin siquiera darse cuenta. Con todo, no existe una cifra exacta que se aplique a todos, ya que la cantidad de agua que se necesita depende de la edad, nivel de actividad física y dieta diaria.

Las personas que sudan mucho o hacen ejercicio regularmente probablemente necesitarán más agua que aquellas que llevan una vida sedentaria. Por otro lado, aquellos que consumen grandes cantidades de café, té o frutas podrían necesitar menos agua que aquellos cuya dieta se basa principalmente en proteínas.

Beber agua sirve para deshinchar el abdomen (foto: Getty Images). | Foto: Foto: Getty Images.

De acuerdo con la Mayo Clinic, “es importante tener en cuenta que beber dos litros de agua al día no es recomendable para personas sanas cuya vida es sedentaria y que no están expuestas a temperaturas altas. Por ejemplo, aquellos que trabajan en una oficina y realizan actividad física de forma regular, pero cuya rutina diaria se lleva a cabo en un clima cálido”.

En resumen, las personas deben beber agua cuando tengan sed, pero si el objetivo es perder peso, se recomienda consumir al menos uno o dos litros al día, dependiendo de la actividad física. Es importante escuchar las señales del cuerpo y ajustar la ingesta de agua según las necesidades individuales.

Comer menos

“Beber agua fría antes de las comidas se ha asociado con una disminución del apetito. De hecho, un estudio ha revelado que beber agua antes de cada comida puede conducir a una pérdida de peso de hasta 2 kilos en tan solo tres meses”, así lo dio a conocer el portal lasexta.com.

Otra investigación ha demostrado que beber agua antes del desayuno reduce la cantidad de calorías consumidas durante la comida en un 13%.

La falta de apetito puede tener varias causas. | Foto: Getty Images

Además, se ha observado que beber más agua está relacionado con una ingesta reducida de calorías y un menor riesgo de aumento de peso.

Dado que el agua no contiene calorías, generalmente se asocia con una reducción en la ingesta calórica. Esto se debe principalmente a que al llenar el estómago con agua, se evita el consumo de otras bebidas o alimentos que sí contienen calorías. De hecho, varios estudios han demostrado que aquellos que consumen más agua ingieren un 9 % menos calorías diarias, lo que equivale a unas 200 calorías menos.