Está científicamente comprobado que comer frutas todos los días trae importantes beneficios para la salud y el cuerpo se mantiene en buenas condiciones. La recomendación es que se incluyan con moderación, dentro de una dieta balanceada.
Las investigaciones también indican que si las personas no se alimentan de manera adecuada, el intestino almacenará toxinas que traerán consecuencias como inflamación estomacal, estreñimiento y colon irritable.
Es por eso que para que el sistema digestivo funcione bien y se eviten esos molestos dolores e incomodidades generadas por el colon irritable es importante consumir alimentos que en cambio de cargarlo, ayuden a limpiarlo y aliviarlo.
Según el Instituto de Cancerología de Las Américas es importante, por ejemplo, el consumo de ensalada en el almuerzo y la comida e ingerir como mínimo tres frutas al día para mejorar la digestión de los alimentos. En la lista de frutas recomendadas para mejorar el proceso digestivo se encuentran la papaya, naranja, mango, granadilla, pitahaya, piña y ciruela pasa, las cuales ayudan a evitar el estreñimiento.
Sus vitaminas y minerales son de fácil absorción para el organismo, lo que mantiene en buen estado el sistema digestivo, sin dejar de lado que hidratan el cuerpo. Por su parte, las frutas ideales para aliviar las molestias del colon son: la manzana, uva, piña, mango, fresa, papaya y sandía.
Consumo de fruta
Las manzanas sean rojas o verdes son recomendadas para ser incluidas en los desayunos o en las onces. Esta fruta, según el portal Mejorconsalud,es rica en fibra en especial si se consume con piel, pues contiene pectina y antioxidantes. Una manzana cruda es buena también para combatir el estreñimiento. La papaya, por su parte, ayuda a mejorar el tránsito intestinal.
Los plátanos son otra de las frutas indicadas para mejorar las condiciones del colon. Comerla a diario también puede ayudar a mantener un buen tránsito intestinal. Según datos de la Fundación Española de la Nutrición, estos alimentos son ricos en potasio, contienen inulina y otros fructooligosacáridos no digeribles por las enzimas intestinales, que alcanzan el tracto final del intestino y tienen efectos beneficiosos sobre el tránsito intestinal.
La sandía también hace parte de la lista de alimentos recomendados para el proceso digestivo dado que contiene una importante cantidad de agua, lo que le permite ayudar a hidratar y mantener un buen movimiento intestinal.
Una función similar cumplen las frambuesas, una fruta que contiene proteínas, vitamina C, folatos, compuestos fenólicos, antioxidantes y, al igual que las manzanas, pectina.
Mucha fibra
Aunque las frutas ayudan a equilibrar la dieta, hay otros alimentos que son clave para evitar las afectaciones en el colon. La fibra es uno de ellos porque ablanda las heces y facilita la evacuación.
Los expertos mencionan dos tipos de fibra: la soluble, que se encuentra en las frutas y productos de avena y la insoluble, que puede hallarse en los productos integrales y en las verduras. Las investigaciones sugieren que la primera es mejor para aliviar los síntomas del colon irritable.
Es importante agregar los alimentos con fibra poco a poco a la dieta para que el cuerpo se vaya acostumbrando a estos productos. Demasiada fibra a la vez puede causar gases, lo que ocasiona un efecto contrario en el intestino. Agregar fibra a la dieta lentamente, de dos a tres gramos por día, puede ayudar a prevenir los gases y la hinchazón.
Según Clínica Mayo, el síndrome de colon irritable es un trastorno frecuente que afecta al intestino grueso. Los signos y los síntomas incluyen cólicos, dolor abdominal, hinchazón abdominal, gases y diarrea o estreñimiento (o ambos). Se trata de un trastorno crónico que se tiene que controlar a largo plazo.
Su expertos indican que una pequeña cantidad de personas con síndrome de colon irritable tienen signos y síntomas graves. La mayoría pueden controlarlos con cambios en la dieta, el estilo de vida y en el nivel de estrés. Los síntomas más graves se pueden tratar con medicamentos y asesoramiento.
Los síntomas de muchas de las personas que sufren de esta afección tienden a empeorar cuando consumen ciertos alimentos y bebidas, como trigo, productos lácteos, frutas cítricas, frijoles, repollo, leche y gaseosas. A esto se suman los altos niveles de estrés.
La recomendación es que si en una persona con síndrome de colon irritable prevalece la diarrea, el estreñimiento o ambas, la dieta rica en fibra es clave en el tratamiento. Si predomina la diarrea se deben evitar evitar los derivados lácteos y si por el contrario, es el estreñimiento, es determinante aumentar la ingesta de agua.