La avena es uno de los cereales más saludables para el cuerpo humano. Al tener buenos nutrientes, vitaminas y minerales, esta permite evitar ciertas enfermedades al reducir el nivel de colesterol y azúcar en la sangre.
Los fitoquímicos presentes en este alimento, preferido por muchos para desayunar o cenar, protegen al cuerpo del cáncer y aporta vitamina E y B5, además de minerales como el hierro, selenio, manganeso y cobre, además de aminoácidos esenciales.
De acuerdo con el portal Farmaciaquintalegre, su alto contenido en fibra soluble beneficia a las personas con diabetes, pues favorece la digestión del almidón y a la vez estabiliza los niveles de azúcar luego de comer. Esta propiedad también le permite facilitar el tránsito intestinal y evitar el estreñimiento.
La leche también es otro alimento que aporta cientos de nutrientes al organismo. Por ello, estos dos ingredientes mezclados aportan grandes propiedades al cuerpo.
De acuerdo con el portal fuentesaludable.com, esta receta ayuda a eliminar toxinas del cuerpo y grasa acumulada, dado el alto contenido el fibra. Además, mejora la digestión y con ello evita enfermedades como la gastritis. Un plus es que da una buena sensación de llenura por más tiempo. Estos son otros de los beneficios:
Es una fuente poderosa de energía, por lo que es recomendada para personas que trabajan o estudian todo el día.
- Previene el cáncer de mama, colon y otros similares.
- Previene enfermedades digestivas como el estreñimiento, gracias al contenido de fibra.
- También le permite mantener una buena salud en sus huesos, gracias al calcio de la leche. También ayuda al buen funcionamiento del sistema nervioso, pues aporta vitaminas del complejo B.
- Es un alimento ideal para deportistas o para quienes se están ejercitando y quieren mantener un peso sano.
Puede consumir esta bebida en un licuado y puede añadirle una pizca de canela molida o hasta una fruta como un plátano o una fresa.
¿Cuál es la mejor bebida para tomar al desayuno?
Todas las personas pueden sentirse cansadas de vez en cuando y con falta de energía por las mañanas. Esto puede suceder, ya sea por el decaimiento, la falta de sueño, el sedentarismo, o una mala alimentación.
Ahora bien, la mayoría de las personas están acostumbradas a desayunar con café o con jugo de naranja como bebida para empezar sus mañanas. Sin embargo, pocas conocen otras que podrían lograr un mejor efecto para tener energía durante toda la jornada.
Afortunadamente, existen pequeñas estrategias que pueden ayudar a dar un impulso y empezar el día con más fuerza. Un desayuno adecuado y nutritivo puede ser una de ellas y en él se pueden añadir ciertas infusiones, o batidos con frutas y otros ingredientes que además de energéticos son deliciosos, según el portal Mejor con Salud.
“Cualquier líquido que vayamos a ingerir debería ser saludable, pero deberíamos evitar al máximo los estimulantes como la cafeína, ya que eso va a provocar un círculo vicioso en el que va a ser cada vez más necesario para empezar el día. Lo ideal sería beber agua a primera hora del día, que va a mejorar la hidratación, pero algunas personas prefieren otro tipo de bebidas,”, detalla la farmacéutica Meritxell Martí para la revista Hola.
- En opinión de Meritxell Martí este es el rey del té, rico en antioxidantes, contiene también flavonoides y aminoácidos, y contiene teína para aportar la energía de la mañana.
- El té verde es rico en antioxidantes, en epigalocatequinas, que actúan como antiinflamatorio natural, así como en vitaminas como la C, y minerales como el selenio, el cromo, el zinc y el magnesio.
- Además, contiene L-teanina que, a su vez, mejora el contenido de serotonina y con ello tiene efecto sobre el buen estado de ánimo. Entre sus propiedades destaca que ayuda a mejorar el metabolismo, la combustión de las grasas. Pero a su vez ayuda a focalizar y a mejorar la concentración y el estado de ánimo.
- A diferencia del café, el té matcha no actúa poniendo nervioso el organismo, sino aportando energía.
- Este tipo de té de origen japonés está cargado de minerales y posee 70 veces más antioxidantes que un jugo de naranja exprimido.