La menstruación es el flujo sanguíneo, procedente del útero de la mujer, que se manifiesta durante algunos días de cada mes, y que es expulsado de manera natural cuando los óvulos fértiles maduros no fueron fecundados.
Este sangrado vaginal, que puede durar alrededor de cinco días, hace parte del ciclo menstrual saludable de cualquier mujer, el cual tiene una duración de entre 21 hasta 35 días, de acuerdo con médicos expertos.
Sin embargo, en algunas mujeres se puede presentar un proceso biológico que puede llevar a alterar ese ciclo menstrual, reflejado en la ausencia del sangrado por periodos largos de tiempo, lo cual es conocido como “amenorrea” y que puede interrumpir la menstruación entre 3 a 6 meses.
De acuerdo con Healthline, portal informativo especializado en temas de salud, la amenorrea puede ocurrir por muchas razones, quizás la más común es el embarazo. Sin embargo, puede ser causada por varios factores del estilo de vida, incluidos el peso corporal, los niveles de ejercicio, desequilibrios hormonales y/o problemas con los órganos reproductivos.
Tipos de menstruación ausente
Se conocen dos tipos de amenorrea. La primaria, que ocurre en la adolescencia, en especial cuando después de los 16 años, aún no se ha tenido el primer periodo. La otra es la secundaria, que es cuando una mujer ha dejado de menstruar durante al menos tres meses. En la mayoría de los casos, ambos tipos se pueden tratar de manera efectiva.
Es importante señalar que la mayoría de las mujeres comienzan a menstruar entre los 9 y los 18 años, pero 12 es la edad promedio.
Causas de menstruación ausente
Conociendo los dos tipos de amenorrea, a continuación se destacan algunas causas naturales que la pueden provocar, y otras que son resultado de afecciones médicas que deben tratarse.
- Las causas naturales con más probabilidades de causar amenorrea incluyen el embarazo, la lactancia y la menopausia.
- Los factores de estilo de vida pueden incluir ejercicio excesivo y estrés. Además, tener muy poca o demasiada grasa corporal también puede retrasar o detener la menstruación.
- Los desequilibrios hormonales pueden causar amenorrea. Por lo general, se desarrollan por tumores en la glándula pituitaria o la glándula tiroides. Los niveles bajos de estrógeno o los niveles altos de testosterona también pueden causarlos.
- Los trastornos genéticos o cromosómicos, como el síndrome de Turner y el síndrome de Sawyer, a veces pueden causar que se atrase la menstruación.
- Ciertos medicamentos pueden causar amenorrea en algunas mujeres.
- A menudo, ocurre por el uso de antipsicóticos y antidepresivos.
- Los medicamentos de quimioterapia y los medicamentos que tratan la presión arterial alta también pueden causar problemas con la menstruación.
- Dejar de tomar píldoras anticonceptivas repentinamente también puede provocar varios meses de ausencia del periodo antes de que el ciclo vuelva a la normalidad.
- Defectos físicos, como problemas estructurales en los órganos reproductivos femeninos, pueden ser responsables de la ausencia o el retraso de la menstruación.
- Estos problemas pueden ser el resultado de defectos de nacimiento, tumores o infecciones que ocurrieron en el útero o poco después del nacimiento.
- En raras ocasiones, la falta de periodos puede ser un síntoma del síndrome de Asherman. Esto ocurre debido a las cicatrices en el útero después de la cirugía, que pueden evitar la menstruación.
Tenga en cuenta que para diagnosticar la amenorrea, el médico podrá solicitar la realización de varios exámenes como análisis de sangre (para conocer los niveles hormonales), el ultrasonido (imágenes detalladas del interior del cuerpo) y tomografía computarizada (imágenes transversales del cuerpo que permiten la identificación de masas y tumores).
Realizado estos procedimientos, se diagnostica esta condición, el profesional de la salud determinará cuál tratamiento se puede aplicar; el cual dependerá de la causa subyacente. Si es por desequilibrios hormonales, se pueden tratar con hormonas suplementarias o sintéticas. Ahora bien, si es por problemas en órganos reproductivos, por la detección de quistes, se puede proceder a su extirpación.
Si no tiene que ver con ninguna de las dos anteriores, el tratamiento puede estar direccionado a cambios en el estilo de vida; por lo que esto puede llevar a que se remita la paciente a un nutricionista, si es necesario.