Una situación muy común en casi todos los hogares del mundo es la de guardar alimentos que sobran y consumirlos recalentados al otro día. Esto, para evitar al máximo el desperdicio de comida y producir más basura.
Sin embargo, existen algunas reglas que muy pocos conocen para guardar alimentos por mucho tiempo. Una de las no negociables es almacenarlas en la nevera, pues allí se puede evitar al máximo la producción de agentes que descomponen la comida.
Pese a ello, existen otros consejos que pueden ayudar a alargar la vida de sus alimentos en la nevera. Aunque es importante verificar siempre el buen estado de los mismos antes de consumirlos. El moho y los olores ácidos son algunas de las señales de que algo no anda bien con su comida.
Por ello, aquí le contamos algunos consejos para almacenar mejor su comida y evitar el crecimiento de hongos y bacterias que podrían enfermarlo.
Consejos para guardar los alimentos en la nevera
1. Uno de los mitos más grandes sobre el almacenamiento de comida es si se puede almacenar en el refrigerador cuando esté caliente. Aunque expertos han dicho que no hay problema y este hecho no disminuye el tiempo de duración de esta comida en buen estado, lo cierto es que si puede provocar un aumento en la factura de energía.
De acuerdo con el canal de Tiktok Viviendo en casa, guardar comida caliente hace que la temperatura de la nevera baje en su interior, lo que produce que este deba hacer más esfuerzo para enfriarse y por ello su motor demandará más energía.
En caso de que tenga que guardar una olla completa de comida, lo que se recomienda es repartir el alimento en diferentes recipientes. De esa forma se enfriará mucho más rápido y se conservará mejor en frío.
2. La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos recomienda congelar los alimentos que lo requieren, tan pronto llegue a su casa luego de adquirirlos. Siga la regla de las 2 horas y nunca permita que carnes, aves, mariscos, huevos, lácteos y otros productos permanezcan por fuera del refrigerador por más de ese tiempo.
3. Tenga en cuenta que la comida puede enfermarlo así no luzca ni huela mal, pues muchas veces las enfermedades transmitidas por alimentos son causadas por bacterias patógenas, que son diferentes de las bacterias de descomposición. Estos organismos pueden estar presentes en la carne cruda o poco cocinada, aves de corral, mariscos, agua sucia y más.
Cómo evitar el desperdicio de alimentos en el hogar
Como primera medida, es fundamental planificar las compras antes de ir al mercado y definir cuánta comida se requiere, es decir, comprar lo necesario, especialmente si se incluyen frutas, verduras, carnes, lácteos y demás alimentos que se descompongan en periodos cortos de tiempo.
Hacer una lista con lo que aún se tiene en casa (despensa y nevera) ayudará a identificar mejor qué alimentos son prioritarios y cuáles se pueden dejar para después, reduciendo el riesgo de que se dañen al no ser aprovechados oportunamente.
Otra alternativa consiste en esquivar las promociones. Si bien los clásicos “pague uno y lleve dos” resultan atractivos, así como los paquetes que reúnen varias unidades de un mismo producto, esta dinámica conduce a que las personas compren más de lo que realmente necesitan.
La segunda recomendación reseñada por el portal Opcions consiste en hacer una correcta conservación de los alimentos. Por ejemplo, cuidar que los productos que necesiten estar en espacios frescos realmente lo estén, así como aquellos que requieran ser almacenados en el refrigerador o el congelador.
Como tercera medida figura un detalle que suele ser ignorado al momento de hacer mercado: verificar las fechas de vencimiento. En ocasiones, por el afán de hacer las compras rápido o aprovechar alguna promoción, las personas pasan por alto verificar el estado del producto. Al caer en este error, resultan sorprendidas cuando notan que ya no es comestible y su sabor ha cambiado como producto de la descomposición natural.