Para muchas personas, la plancha del cabello se ha convertido en una herramienta imprescindible a la hora de arreglarse y embellecerse todos los días, pues su versatilidad no tiene discusión.
Se trata de un aparato que toma relevancia debido a su facilidad de uso, pero también a los beneficios que presta en torno a lo que las personas pueden hacer con el pelo, pues además de alisar permite crear ondas y rizos, brindando la posibilidad de lucir diferente. Sin embargo, es clave utilizarla de manera indicada.
De acuerdo con un artículo publicado en Indian Dermatology Online Journal, si esta herramienta no se usa bien puede generar, por ejemplo, caída del pelo, así que lo mejor es evitar errores.
Una de las preguntas que surgen con frecuencia es si debe utilizarse con el pelo mojado o seco, pues hay quienes creen que si se alisa mojado puede brindar un mejor resultado. Sin embargo, la realidad es que planchar el cabello mojado es una gran equivocación que puede acabar destrozándolo, salvo que sea un aparato especial para planchar mojado.
Las planchas del pelo comunes, a pesar de estar diseñadas para no quemarlo, tienen una enorme potencia que aumenta la temperatura del cabello. Si a esto se le añade vapor, se puede dañar la cutícula del cabello, es por eso que la mejor opción es alisar el pelo seco.
Adicionalmente, los especialistas recomiendan que después de secar el pelo con el secador se deje enfriar para evitar que se sobrecaliente. Expertos de la marca Garnier indican que lo mejor sería dejarlo secar al natural, pero si se va a utilizar una plancha, una de las recomendaciones es calentarla bien antes de ponerla en contacto con el pelo.
De esta forma, se logrará un mejor resultado sin tener que dar tantas pasadas, lo que beneficia la salud del pelo. Si existe la posibilidad de regular la temperatura es ideal usar la indicada, según el tipo de cabello.
Expertos también aconsejan iniciar la alisada por las raíces y luego mover la plancha lentamente hacia abajo. Entre más lento se haga el proceso, más rápido se alisara, lo que significa que no se tendrá que pasar la plancha por el mechón una y otra vez, y así se reduce la posibilidad de quebrar el tallo del cabello.
Para compensar el daño producido con los alisados conviene recortar las puntas más o menos cada seis semanas. Esto evita las puntas abiertas, algo muy usual en quienes se alisan el pelo, y ayuda a que se regenere.
Otros errores frecuentes
Si bien el pelo puede aguantar todo tipo de condiciones, agentes externos, productos y peinados, si se quiere tener un cabello sano es importante cuidarlo y protegerlo para que no termine quemado, sin brillo y estropeado. Si se utiliza la plancha con regularidad, además de hacerlo con el pelo seco, es importante no cometer otros errores.
Uno de ellos es descuidar la hidratación. El calor tiende a causar resequedad y pérdida de aceites naturales. Por lo tanto, es necesario proporcionar más nutrientes al pelo a través de mascarillas hidratantes o acondicionadores.
Adicionalmente, es común pensar que entre más veces se pase la plancha, el pelo quedará más liso y el peinado durará más tiempo en perfecto estado. No obstante, esto aumenta las probabilidades de que se queme y se deteriore. Una o dos pasadas son suficientes para obtener el alisado. En cabellos rizados, quizá es necesario que se pase más veces, pero sin excederse.
La plancha no se debe poner en el nivel máximo para lograr los resultados deseados. Con una temperatura media es posible que sea suficiente para que el pelo quede liso. Adicionalmente, según un artículo publicado en la revista Marie Claire es importante asesorarse y seleccionar la plancha de acuerdo con el tipo de pelo.
No es aconsejable usar la plancha de forma tan seguida. El cabello no soporta uso permanente de esta herramienta, por ello lo ideal es dejar descansar el pelo si es posible un día de por medio para evitar mayores afectaciones.
Un artículo publicado el el diario Mundo Deportivo, plantea una serie de consejos que las personas pueden tener en cuenta para planchar el pelo con acabados profesionales.
- El pelo siempre debe estar limpio y sano, para que luzca brillante y homogéneo.
- El cabello tiene que estar completamente seco y atemperado
- Para prevenir nudos y encrespamientos, antes de proceder a planchar y alisar el pelo, la persona debe asegurarse que está bien desenredado.
- Para que el resultado sea más preciso, la clave es no tener afán a la hora de alisarlo y dividir el pelo en mechones pequeños con la ayuda de un peine.
- La mejor técnica para alisar el pelo es recogerlo, alisando desde las partes más bajas a las más altas de la cabeza, planchando siempre de raíz a puntas.
- Entre mechón y mechón es importante esperar a que se enfríe un poco para que el cabello vaya adquiriendo la forma y no coja demasiada temperatura.
- Para evitar el frizz, a la hora de peinar el pelo, es necesario evitar los cepillos y utilizar un peine de púas anchas.