Compartir la vida con un animal de compañía tiene múltiples beneficios para toda la familia. Los efectos positivos que aporta el vínculo de un humano con estos seres son numerosos. Sin embargo, para los adultos mayores, tener un perro -cualquiera que sea su raza- es clave, pues mejora su estado físico y su bienestar.
Los perros pueden generar un cambio importante en la vida de estas personas, ya que les aportan vitalidad y compañía, disminuyendo la sensación de soledad.
Tomar la decisión de tener un perro es determinante, pues cada vez las personas viven más años y en muchos casos la soledad se convierte en su única compañera. Un perro le permitirá sentirse acompañado, vital y saludable. Estas mascotas ayudan a que las personas mayores se sientan útiles, eviten la tristeza e incluso la depresión que en muchos casos aparece en los últimos años de vida.
De acuerdo con el portal Infobae, un estudio científico realizado en 2019 halló que las personas con perros tenían más probabilidades de mantener una mejor salud cardíaca y ser más activas que las que no tenían mascotas.
Sin embargo, de acuerdo con Purina Latam, antes de adoptar o comprar un amigo de cuatro patas es importante considerar que hay razas que se adaptan mejor al estilo de vida de quienes están en la edad de oro.
En su página web, los especialistas de esta marca de comida para animales, indican que lo primero que hay que tomar en cuenta es que no sólo acompañará al adulto mayor, sino que también se debe considerar el nivel de atención y cuidados que la mascota requerirá.
De igual forma, expertos recomiendan tener en cuenta el tamaño. No deben ser muy grandes para que sea sencillo sacarlos a la calle, y de esta forma evitar caídas o que tiren demasiado fuerte de la correa. No deben requerir cuidados muy complejos o necesitar un nivel alto de actividad.
Teniendo en cuenta lo anterior, sugieren algunas razas que son indicadas para estas personas.
Bichón Frisé: Son animales pequeños y juguetones pero no tan demandantes de actividad física como otras razas. Tienen la peculiaridad de ser hipoalergénicos.
Cavalier King Charles Spaniel: Se trata de perros cariñosos y les encanta la compañía, no sólo de los humanos… ¡también de otras mascotas! Esto los hace unos buenos amigos para el adulto mayor.
West Highland Terrier: Tienen una cara tierna, son inteligentes, amorosos y leales y lo mejor es que con un poco de ejercicio moderado se dan por bien servidos.
Golden retriever: Es amable, amigable y confiado. Estos perros pueden ser muy pacientes, amorosos y tiernos, especiales para la compañía de estas personas.
Labradores: Son afables, tranquilos y cariñosos. Muy sociables y se llevan bien con otros animales, además de ser enormemente fieles y encantarles sentirse en familia.
Chihuahua: Su estado de alerta, inteligencia y tamaño los hacen adaptables a una variedad de ambientes y espacios. Son saludables y amorosos.
Pug: Sus rostros expresivos y su disposición consentida los convierten en buenos compañeros para las personas mayores y una de las razas de perros más amables. Los pugs adoran a sus dueños y son conocidos por seguirlos.
Schnauzer miniatura: Son perros que se adaptan tanto a los espacios interiores como exteriores. Son pequeños, robustos, hipoalergénicos y cariñosos. Su tranquilidad, y su sintonía con los estados de ánimo de los humanos, los convierte en excelentes animales de terapia.
El portal Infobae añade otras razas a esta lista y en ellas incluye, por ejemplo: galgo greyhound, toy poodle, goldendoodle, shih tzu, bulldog francés, Pomerania, beagle, Bullmastiff, todos ellos con características particulares que los ajustan muy bien a las necesidades de las personas adultas.
Y aunque estas son algunas recomendaciones, según los expertos, si las personas tienen el amor y la dedicación necesarias, prácticamente cualquier raza de perro puede convertirse en un buen amigo para un adulto mayor, incluso los criollos, que tal vez puedan acoplarse con cierta facilidad a la personalidad de su dueño al no seguir los rasgos de una raza en específico.