San Andrés es uno de los lugares más apetecidos para pasar unos días de vacaciones. Su clima, las playas de arenas blancas y los tonos multicolor de su mar hacen de la isla un destino único en el mar Caribe. Sin embargo, la oleada de turistas que llega cada año al archipiélago ya ronda el millón de personas y la tendencia es que el número aumente, pues siguen construyéndose nuevos hoteles y centros comerciales para cubrir la oferta de turistas. Frente a este panorama, la Corporación para el Desarrollo Sostenible del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina (Coralina) lidera una apuesta por un nuevo tipo de turismo, basado en una oferta que va más allá del comercio y las playas. A través de la campaña “Momentos En Seaflower”, con el propósito de reposicionar a la Reserva de Biosfera Seaflower, en el Caribe colombiano, como un destino que ofrece un turismo vivencial con la naturaleza. SEMANA RURAL conoció la cultura raizal, restauración de ecosistemas maritimos, parques naturales y negocios verdes, que representan nuevas alternativas en este paraíso caribeño que está sufriendo los efectos del calentamiento global. Con estas ofertas en favor del medio ambiente, la isla plantea acciones puntuales para mitigarlos. Conozca en los siguientes vínculos las experiencias que puede vivir cuando visite el archipiélago.
Un salvavidas para los arrecifes coralinos Negocios verdes: la nueva tendencia de emprendimientos en San Andrés En San Andrés el manglar tiene un segunda oportunidad