¿Cómo mejorar la memoria a corto plazo?

La memoria, esa habilidad increíble del cerebro humano que nos permite retener, almacenar y recuperar información, es esencial en la vida de cada individuo.

Desde recordar nombres y fechas importantes hasta aprender nuevas habilidades y conocimientos, la memoria desempeña un papel vital en las actividades cotidianas de las personas. Sin embargo, con el paso del tiempo o frente a situaciones de estrés, es común experimentar dificultades en la retención y recuperación de la información.

Afortunadamente, hay una serie de estrategias y técnicas respaldadas por la ciencia que pueden ayudar a mejorar la memoria y potenciar las capacidades cognitivas. Estos métodos efectivos no solo son prácticos, sino fundamentados en investigaciones, lo que los convierte en herramientas valiosas para aquellos que desean fortalecer su memoria.

Consejos para mejorar la memoria a corto plazo

En el mundo de la memoria, existen dos categorías principales: la memoria a corto plazo y la memoria a mediano plazo.

De acuerdo con el portal mejorconsalud.as.com, “la primera se encarga de almacenar información inmediata, como el nombre de alguien que acabamos de conocer. Sin embargo, su capacidad es limitada y tiende a desvanecerse rápidamente si no se refuerza”.

Por otro lado, la memoria a mediano plazo se utiliza para retener datos que requieren mayor concentración o esfuerzo, como prepararse para un examen o recordar tareas cotidianas importantes. Esta forma de memoria tiene una capacidad relativamente mayor y puede retener información durante un período más prolongado, siempre y cuando se refuerce adecuadamente.

Prestar atención

Es esencial para las personas evitar realizar múltiples tareas al tiempo, en la medida de lo posible. Según algunos especialistas, la práctica del multitasking, es decir, llevar a cabo varias actividades simultáneamente, es contraproducente. A pesar de que los seres humanos tienen la capacidad de prestar atención a varias cosas a la vez, no se recomienda abusar de esta habilidad.

En lugar de dividir su atención entre varias tareas, las personas deberían centrarse en realizar una sola actividad. La investigación científica ha demostrado que el cerebro funciona de manera óptima cuando se enfoca en una tarea individual. Como resultado, los logros obtenidos son notablemente mejores cuando se aborda una tarea a la vez.

Además, tiene sentido que tanto el cerebro como el sistema nervioso experimenten menos estrés cuando se les permite concentrarse en una única tarea. Esta práctica no solo mejora la calidad del trabajo realizado, sino que ayuda a reducir la carga mental y física, contribuyendo así a un estado general de bienestar y rendimiento óptimo para las personas que la practican.

Realizar juegos mentales

La memoria a corto plazo es increíblemente adaptable y puede ser estimulada de diversas formas. El cerebro responde a los estímulos y ejercicios de manera similar a como lo hacen los músculos del cuerpo. Cuando alguien aprende algo nuevo, el cerebro establece conexiones neuronales adicionales, lo que lo mantiene activo y en constante cambio.

Para entenderlo mejor, se puede imaginar la red de metro en una ciudad. Cada nuevo conocimiento adquirido es como una nueva línea que se agrega a las complejas rutas y estaciones que ya estaban interconectadas en ese mapa mental.

Esta es la razón por la cual resulta tan crucial proporcionar al cerebro el ejercicio cognitivo necesario para ponerse en marcha y desarrollarse plenamente. Al mantener el cerebro activo y desafiado, se fomenta el crecimiento y la expansión de sus conexiones neuronales, lo que a su vez mejora la memoria y la función cognitiva en general.

Segmentar la información y organizarla

Recordar un número de teléfono completo de 10 dígitos puede resultar una tarea abrumadora si se intenta memorizar como un solo conjunto numérico. Sin embargo, al dividirlo en secuencias más manejables, como grupos de tres, cuatro o dos números, la tarea se vuelve considerablemente más sencilla y efectiva.

Practicar este enfoque de segmentación puede ser un excelente ejercicio para mejorar la memoria, especialmente en situaciones en las que se olvida el teléfono móvil en casa.

El método implica repetir estos bloques de dígitos varias veces hasta que se logre consolidar en la memoria el número de teléfono en cuestión. Esta técnica no solo facilita la retención de información, sino que mejora la capacidad para recordar detalles importantes cuando más se necesitan.

El principio de la segmentación es versátil y puede aplicarse en diversas situaciones que requieren organización mental. Por ejemplo, al estudiar, es común crear esquemas o cuadros sinópticos para resumir las ideas claves de un texto.

“Esta práctica no solo ayuda en la comprensión, sino que refuerza la memoria al dividir la información en partes manejables y fáciles de recordar”, destaca la Mayo Clinic.

Así, al adoptar este enfoque, las personas pueden mejorar su capacidad de retener información crucial en diferentes contextos de la vida diaria.