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Caso Turpin: cadena perpetua a los padres de la "casa de los horrores"
Los hijos de los Turpin, la pareja de California que torturó a sus niños durante años, perdonaron a sus padres en el juicio en los que se los sentenció a cadena perpetua.
Pese al horror y las torturas, perdonaron a sus padres.
Algunos de los hijos de una pareja de California que fueron torturados por sus padres por años decidieron perdonarlos durante el juicio que se llevó a cabo en contra de sus progenitores. Este viernes David y Louise Turpin fueron condenados a cadena perpetua.
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Los hijos dijeron ante el tribunal de justicia que, a pesar de todos los abusos, aún aman a su madre y a su padre. La pareja fue arrestada en enero de 2018 cuando su hija de 17 años escapó de la casa familiar en Perris, California.
Los Turpins se declararon culpables de haber abusado de 12 de sus 13 hijos durante al menos 9 años. Se espera que pasen el resto de sus vidas tras las rejas, a menos que se les conceda la libertad condicional en 25 años.
¿Qué dijeron los niños?
La pareja lloró al escuchar las duras declaraciones de cuatro de sus hijos en la audiencia del viernes. "Amo mucho a mis dos padres", dijo uno de ellos al leer la declaración de su hermano.
"Aunque puede que no haya sido la mejor manera de criarnos, me alegro de lo que hicieron porque me han convertido en la persona que soy hoy",añadió.
David Turpin se quebró cuando se conoció la sentencia. Foto: AFP.
Otro de los hermanos relató el trauma de haber vivido esa terrible experiencia.
"No puedo describir con palabras lo que vivimos al crecer allí", dijo. "Todavía tengo pesadillas de cosas que pasaron, como cuando mis hermanos eran encadenados o golpeados".
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"Pero eso quedó en el pasado y esto es ahora. Amo a mis padres y los he perdonado por muchas de las cosas que nos hicieron". Pero no todos los hijos fueron tan conciliadores. Una de las hijas dijo temblando: "Mis padres me quitaron mi vida, pero ahora la estoy recuperando".
"Soy un luchadora y soy fuerte". "Vi a mi papá cambiar a mi mamá. Casi me cambiaron a mí, pero me di cuenta de lo que estaba pasando", agregó.
Louise Turpin sonrió en algunos momentos de la audiencia del viernes. Foto: AFP-BBC.
¿Qué dijeron los padres?
David y Louise Turpin lloraron cuando se disculparon por cómo trataron a sus hijos. "Mi educación y disciplina en el hogar tenían buenas intenciones", dijo David Turpin en una declaración a través de su abogado.
"Nunca tuve la intención de hacer daño a mis hijos. Amo a mis hijos y creo que mis hijos me aman".
David Turpin, de 57 años, trabajaba como ingeniero en las dos principales contratistas de defensa estadounidenses Lockheed Martin y Northrop Grumman.
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Al dirigirse al tribunal, Louise Turpin, de 50 años, quien era ama de casa. dijo que estaba "realmente arrepentida" por lo que había hecho. "Amo mucho a mis hijos. Realmente espero con ilusión el día en que pueda verlos, abrazarlos y decirles que lo siento", aseguró.
¿Qué dijo el juez?
La pareja no mostró emoción mientras el juez los acusaba de un "trato egoísta, cruel e inhumano" con sus hijos.
"La única razón por la que el castigo es menor que el tiempo máximo es porque aceptaron la responsabilidad en una etapa temprana del procedimiento", dijo el juez Bernard Schwartz.
"Eso le ahorró a sus hijos tener que revivir la humillación y el daño que sufrieron en esa casa del horror".
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¿Qué tuvieron que soportar los niños?
La fachada de la casa de la familia de clase media a unos 112 km al sur de Los Ángeles ofrecía una apariencia de orden y tranquilidad, aunque en realidad enmascaraba la suciedad y el olor nauseabundo de los desechos humanos encontrados por las autoridades. Los niños, que tenían entre 2 y 29 años en el momento del allanamiento policial, estaban gravemente desnutridos.
Uno de los hijos, de 22 años, fue encontrado encadenado a una cama. Sus dos hermanas acababan de ser liberadas de grilletes. Las víctimas tenían prohibido ducharse más de una vez al año, no podían usar el baño y ninguno de ellos había visto a un dentista.
El crecimiento de algunos de los hermanos mayores fue atrofiado por la mala alimentación a tal punto de que las autoridades los confundieron con niños en un principio.
El audio de la llamada al 911 de la hija que pudo escapar y que recientemente fue publicado por la cadena ABC, brinda indicios de las condiciones en que vivían los niños.
"Dos de mis hermanas y uno de mis hermanos... están encadenados a su cama", le dijo a la operadora del servicio de emergencias la adolescente de 17 años, que no sabía su propia dirección.
"A veces me despierto y no puedo respirar porque la casa está muy sucia". La joven tampoco sabía el año o el mes en el que vivía o el significado de la palabra "medicación".
Los hijos de los Turpin, cuyos nombres comienzan todos con la letra J, estaban cautivos en el interior de la casa, pero se les permitía salir en fechas determinadas como Halloween o en viajes familiares a Disneyland y Las Vegas.
Alrededor de 20 personas de todo el país, incluidas enfermeras y psicólogos, se ofrecieron a cuidar a los siete hermanos mayores y seis niños.