El Giro de Italia aplica severa sanción para Fernando Gaviria por su pataleta en la etapa 6

El tercer embalaje de velocitas puros en lo que va del Giro de Italia 2022 volvió a tener un sabor amargo para el colombiano Fernando Gaviria, que sigue sin ganar y visiblemente tenso porque las cosas no le han salido como esperaba a pesar de tener las condiciones físicas y la ambición de pelear con los grandes favoritos a la maglia ciclamino (puntos).

Arnaud Demare (Groupama FDJ) fue el ganador del día en un esprint marcado por el desorden provocado por una glorieta antes del último kilómetro. Gaviria perdió la línea de su tren de lanzamiento y tuvo que batallar prácticamente solo para intentar ubicarse en el ataque definitivo.

El Misil parecía encontrar un resquicio en los últimos 500 metros e intentó aprovechar para alcanzar a sus habituales condentiendes; sin embargo, se encontró de frente con dos corredores del DSM que le obstaculizaron la salida.

Ansioso por no conseguir la victoria, Fernando comenzó a empujar al neerlandés Cees Bol y por poco lo hace estrellarse con la valla de seguridad, acción que siempre es rechazada por la UCI y los organizadores de las principales carreras europeas, mucho más si se trata de una grande, en la que la mirada de todo el mundo está encima de los acontecimientos.

Al ver que la posibilidad de disputar el esprint se desvaneció, Gaviria empezó a golpear el manillar y, al cruzar la meta, se fue hacia el bus de su equipo sin mediar palabras con los medios de comunicación y, mucho menos, disculparse con el corredor afectado.

Los delegados del Giro revisaron las imágenes y tomaron la decisión de sancionarlo con el último lugar de la sexta fracción, a la que había llegado en la casilla 64 con el mismo tiempo del ganador que se tuvo que definir por la vía del photo finish.

Culpan a Gaviria

De momento no se tiene versión oficial del comisario ni el director del UAE Team Emirates, pero el equipo DSM sí se refirió al desordenado embalaje que acabó encontrándolos con un desmedido Fernando Gaviria.

“Creo que estábamos en una muy buena posición al llegar a la final. Los muchachos protegieron la burbuja de una manera muy buena, lo que me hizo muy feliz. Al final fue un esprint caótico, pero seguimos encontrándonos”, manifestó Matt Winston, técnico del equipo neerlandés.

La opinión generalizada en línea de meta es que es justo el castigo para el antioqueño, que intentó utilizar a los dos corredores del equipo rival para meterse en el frente de carrera y, desafortunadamente, se encontró con una barrera en la que los dos del DSM no incurrieron en ninguna maniobra peligrosa.

“Alberto (Dainese) estaba haciendo un muy buen lanzamiento y parecía que había un poco de aglomeración allí en el final. Lamentablemente, nos impidió poder correr para obtener un resultado con Cees (Bol)”, añadió Winston sin entrar en polémica sobre lo sucedido con Gaviria.

Aparte de no lograr el objetivo de la etapa, el velocista de La Ceja tampoco sumó puntos en la clasificación de la maglia ciclamino y se pone una cruz sobre sus hombros relacionada a las críticas por la exageración en las revoluciones y la reacción que tuvo al resultado de las dos últimas jornadas.

Recordó que en la etapa 5 también había protagonizado una rabieta con golpes incluidos a su bicicleta por terminar en segundo lugar detrás de Demare.

La próxima etapa con posibilidad de terminar al esprint será el próximo sábado 14 de mayo en Nápoles, prueba en la que solo habrá un puerto de cuarta categoría y terminará en un territorio totalmente plano al sur de Italia.