Clint Eastwood habla de su última película, Hoover, y de volver a actuar

En la víspera del estreno en Nueva York de su último filme, "Hereafter", una película en la que de forma muy personal e intimista aborda la habilidad psíquica que algunas personas tienen para conectarse con los muertos, Eastwood se reunió en la Gran Manzana con un grupo de periodistas para hablar de sus proyectos.

Del próximo, Eastwood afirma que quiere que "sea algo loco. 'Hoover' es una opción interesante porque el personaje lo es. Crecí viéndolo desde el punto de vista de un niño y sería interesante hacerlo desde la perspectiva de cómo era realmente y qué relaciones tenía".

Edgar Hoover (1895-1972) "empezó en el FBI cuando tenía 20 años, hizo muchas cosas impresionantes pero también otras no tanto", agregó.

"Sí, si encuentro un buen papel" volvería a actuar, responde esta leyenda viva del cine estadounidense que la última vez que se colocó a ambos lados de la cámara fue con su "Gran Torino" (2008).

Eastwood a sus recién cumplidos 80 años ni siquiera piensa en retirarse, aunque admite: "algunas veces lo he pensado, pero no, me gusta lo que hago".

Entre esos gustos está abordar temáticas diferentes como ha hecho con "Hereafter", con guión de Peter Morgan y protagonizada por Matt Damon y Cécile De France, y una historia que le cautivó porque es la "de diversas personas alrededor del mundo, gente que está tratando con la pérdida de maneras diferentes".

"Son tres historias totalmente diferentes pero todas conectadas por gente que quiere saber qué se esconde en el misterio de la muerte, en la vida después de la muerte", explicó.

Eastwood, un romántico empedernido, como en algunas de sus otras películas ha introducido ese elemento en el film que, según señaló Matt Damon a Efe, "es una historia de amor, pero una historia de amor diferente".

El protagonista de "Dirty Harry" (1971) o "Unforgiven" (1992) reconoce que "nunca había leído una historia así ni visto una película exactamente como ésta" y que por eso la quiso hacer.

"Supongo que estoy en una etapa en la que no quiero hacer cosas repetitivas o replicar algo que ya hice en el pasado", dijo el director estadounidense.

También admitió que durante el proyecto sí que pensó sobre su propia muerte, al tiempo que con ironía recordó que su relación con la muerte al principio de su carrera "era ayudar a la gente a morir".

Respecto a sus propias creencias, el director de "Million Dollar Baby" (2004) recordó que se crió "sin una iglesia concreta" porque nació en la época de la Gran Depresión y si familia se mudaba "cada cuatro o cinco meses". Así que fue a muchas iglesias, "la que estaba más cerca, la mayoría protestantes pero también otras católicas".

Preguntado por quién le gustaría encontrar en el más allá, Eastwood respondió que le gustaría "hablar con la gente con la que nunca se encontró. "Con familiares. Seguramente el primero siempre sería un familiar cercano".

"O también con los grandes artistas o los grandes músicos como Tchaikovsky, Rachmaninoff, Beethoven, Charlie Parker o el general Patton", añadió Eastwood, quien para "Hereafter" compuso dos de los temas de su banda sonora.

"Toco desde pequeño pero nunca he tenido disciplina. Si hubiera tenido la oportunidad de ir a un conservatorio y practicar seguramente lo haría mucho mejor y me hubiera dedicado a ello", señaló, aunque afirmó que por lo que realmente siente pasión es por la dirección.

"Mi parte preferida de hacer una película es dirigir, la dirección está relacionada con cada aspecto de la película", dijo Eastwood.

El director de "Mystic River" (2003) aseguró: "Sigo sintiendo pasión por la dirección, como cuando empecé, pero quizás ahora estoy más relajado porque hace tiempo que conozco el proceso".

También opinó sobre la tendencia actual a utilizar las técnicas de 3D y señaló que "es algo que distrae un poco, pero puede estar bien" aunque aseguró: "Yo todavía no he encontrado una historia para hacerla en 3D".