Así se puede usar el vinagre blanco para ahuyentar ratas y ratones

Los ratones no son bienvenidos en ninguna casa. Son animales que generan repudio, pues además de causar destrozos pueden ocasionar afecciones de salud, si permanecen por mucho tiempo o si proliferan generando una plaga.

Si bien hay diversas formas de deshacerse de estos roedores, ya sea con productos comerciales que acaban con su vida o con trampas que ayudan a cogerlos, también hay formas con trucos y productos caseros que resultan válidos cuando de evitar su presencia se trata.

Uno de ellos es el vinagre blanco. Este ingrediente es opción muy olorosa y odiada por estos animales, debido a que pueden sentir el olor, el triple de fuerte que los humanos.

Hay diferentes formas de aprovechar sus beneficios para alejar de la vivienda a estos molestos animales. Una de ellas, según el portal Cuerpo Mente, es llenar un balde de limpieza con agua caliente y luego agregar suficiente vinagre para que se pueda sentirse en olor agrio. Luego se limpia el suelo de toda tu casa con la mezcla.

Es importante acceder con este producto debajo de los armarios y las camas. También es viable empapar unos trapos de tela con vinagre puro y colocarlos en los caminos preferidos de los ratones. El vinagre no es tóxico, pero los ahuyenta.

Una alternativa más es, de acuerdo con el portal Gastrolab, colocar frascos de agua con vinagre en áreas donde se hayan encontrado heces de roedores. Se limpian las despensas o espacios donde suelen alojarse con vinagre diluido y se pueden poner algodones remojados en esta sustancia en sitios o hendiduras donde se resguardan.

Otras alternativas

La canela y el clavo de olor son espacias que también ahuyentan a ratas y ratones. Se puede usar el aceite esencial de menta, los palitos de canela y los clavos de olor. Es posible rociar aceite de menta en trapos y dejarlos por donde se cree que pueden entrar o circular los ratones.

Otra opción es llenar saquitos con las especias y dejarlos en armarios, despensas y rincones. En esos saquitos se introducen tres o cuatro palitos de canela, varios clavos de olor, pimienta de Cayena y unas gotitas de aceite esencial de menta y se reparten por los rincones y de esa forma no se recibirán más visitas de los ratones.

La arena de gatos también ayudaría. Se dice que el simple olor de los felinos domésticos suele ser suficiente para ahuyentar a los roedores, que prefieren mantenerse alejados de sus depredadores. Se llena una bolsa de tela con arena para gatos usada y se coloca cerca de los corredores y agujeros en los que aparecen los roedores, los cuales huirán.

Por último, cuando se quieren acabar con estos animales se puede hacer uso de bicarbonato. Sin embargo, se debe tener en cuenta que en este caso no se ahuyentarán, sino que morirán. Para ello se debe mezclar azúcar y bicarbonato de sodio a partes iguales. Una vez se tenga la mezcla hecha, se coloca en un recipiente y se pone en el lugar donde se hayan visto los roedores para que el azúcar atraiga a las ratas y se coman el cebo.

El efecto del bicarbonato de sodio en el cuerpo de las ratas hará que se empiece a producir gas en su interior, pero como las ratas y roedores no pueden expulsar los gases en forma de eructos, la acumulación de gas en su cuerpo las matará.