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El color rojo en el Feng Shui simboliza desde la pasión ardiente hasta la energía transformadora.
El color rojo en el Feng Shui simboliza desde pasión hasta buena suerte. | Foto: Getty Images

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Color rojo en el Feng Shui: ¿qué significa y por qué se usa tanto?

Al usarlo de manera consciente y equilibrada, se pueden potenciar diferentes aspectos de la vida personal, profesional y espiritual.

Redacción Cómo
3 de julio de 2024

En el antiguo arte chino del Feng Shui, el color rojo no pasa desapercibido. Asociado al elemento fuego, este tono vibrante representa una fuerza vital que impregna diversos aspectos de la vida, desde la pasión ardiente hasta la energía transformadora. Su simbolismo profundo y su poder energético lo convierten en una herramienta invaluable para armonizar espacios y atraer diferentes aspectos positivos.

Simbolismo del rojo en el Feng Shui

  • Energía y vitalidad: El rojo evoca la fuerza vital que impulsa el entusiasmo, la motivación y la acción. Es un color que despierta los sentidos y estimula el movimiento, combatiendo la apatía y el letargo (sueño profundo y prolongado).
  • Pasión y amor: El rojo es el color del amor apasionado, la sensualidad y la atracción. Simboliza la intensidad de los sentimientos y la entrega en las relaciones.
  • Prosperidad y abundancia: En la cultura china, el rojo se asocia con la buena suerte, la fortuna y la prosperidad. Atrae energías positivas que favorecen el éxito financiero y la abundancia material.
  • Protección y seguridad: El rojo también representa la protección y la seguridad. Se utiliza para alejar las energías negativas y crear un ambiente seguro y armonioso.
Este animal a menudo es usado para atraer la buena energía.
El color rojo se puede incorporar en casa como en el trabajo por medio de los objetos representativos de la cultura china o asimilaciones propias. | Foto: Getty Images/iStockphoto

El rojo en lo personal, profesional y laboral

  • Para la pasión y el amor: El rojo puede ser un aliado en la búsqueda del amor y la pasión. Se recomienda utilizarlo en el dormitorio en pequeñas dosis, como en cojines, cuadros o adornos.
  • Para la energía y la motivación: Un toque de rojo en el espacio de trabajo puede aumentar la energía, la concentración y la productividad. Se puede usar en sillas, escritorios o accesorios.
  • Para la prosperidad y la abundancia: El rojo atrae la buena suerte y la prosperidad en el ámbito financiero. Se puede incorporar en la puerta principal de la casa, la billetera o detalles decorativos en la sala de estar o el trabajo.
  • Para la protección: El rojo puede brindar protección contra energías negativas. Se puede colocar un objeto rojo en la entrada de la casa o usar una pulsera roja como amuleto.
Monedas chinas
Las monedas chinas con un lazo rojo son símbolo de abundancia y prosperidad en el Feng Shui. | Foto: Getty Images

Recomendaciones para usar el rojo

  • Equilibrio: Si bien el rojo es un color poderoso, es importante usarlo con moderación. Un exceso puede generar desequilibrio e irritabilidad.
  • Armonía: Combinar el rojo con colores complementarios o neutros para crear un ambiente armonioso.
  • Intensidad: Los tonos más claros de rojo, como el rosa, pueden ser más adecuados para espacios como el dormitorio o el baño.
  • Intuición: Hay que conectarse con la intuición y observar cómo el rojo influye en diferentes espacios.

El rojo, en sus diversas tonalidades, es un color vibrante que aporta energía, pasión y transformación al Feng Shui. Al usarlo de manera consciente y equilibrada, se pueden potenciar diferentes aspectos de la vida personal, profesional y espiritual. Es importante recodar que la clave está en encontrar el balance adecuado para crear espacios armónicos y llenos de vitalidad.

El poder de la paleta: cómo crear armonías cromáticas que elogien el rojo
El color rojo se puede incorporar en cada aspecto de la vida, desde la ropa hasta los objetos. | Foto: Getty Images

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.