¿Cómo cuidar la salud mental en las empresas? Cinco claves para darle bienestar a los trabajadores

El cuidado de los empleados debe ser un pilar en cualquier compañía, por lo que debe ser fundamental tener en cuenta su bienestar para gozar de una armónica cultura empresarial.

Entre los diversos cambios de las compañías del pasado con las actuales, uno de los más destacados ha sido el papel tomado por la salud mental de los empleados. No obstante, aún se requieren doblar esfuerzos para que el bienestar de los trabajadores no se vea perjudicado.

Sobre ese asunto se centraron los expertos de la Fundación Haz de España para dar a conocer una serie de consejos para cuidar la salud mental de los empleados.

En primer lugar, señalaron que todavía sigue complicado que las empresas realicen planes de bienestar relacionados con este punto; tanto así que es común conocer casos de gerencias que no lo aplican como debería ser ni tomar las recomendaciones respectivas. Empero, destacan que otra gran parte de las compañías han cambiado su filosofía para adoptar el bienestar empresarial como un asunto clave para el funcionamiento de la compañía.

Anabel Fernández, CEO de Affor Health, le explicó a la revista de la fundación que el cuidado de la salud mental y los riesgos psicosociales han entrado en una tendencia de normalización, por lo que se han convertido en una necesidad de primer nivel para las compañías.

“Es necesario que las empresas entiendan que las personas son su valor más preciado y que promuevan su salud mental y bienestar tanto en el ámbito profesional como personal para mejorar su calidad de vida”, señaló.

Con base en las cifras de Obertament, la asociación catalana contra la estigmatización de la salud mental, señala que cuatro de cada diez adultos tienen un estatus de salud mental oscilante entre regular y malo, siendo el 70% personas que han desarrollado trastornos ocasionados por esa situación.

Sumado a ello, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) indica que cada año se pierden 12 millones de dólares causados por la depresión y ansiedad, dos trastornos que afectan a los empleados y terminan repercutiendo en asuntos económicos de las compañías.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) explica que cada dólar gastado para abordar esta situación representa un retroceso de cuatro dólares en mejora de la salud y productividad. En ese orden de ideas, recomiendan cuidar la salud física y emocional para que exista un aumento en la motivación y rendimiento, reducción del absentismo y potenciar el clima laboral.

Teniendo en cuenta la información de Obertement, la fundación Haz afirmó que el 60% de los empleados con antecedentes de salud mental deteriorada no han dejado de acudir a la oficina y el 90% no se ha sentido capaz de hablar al respecto sobre esa situación.

En ese orden de ideas, el primer consejo de los expertos radica en romper la barrera de la estigmatización. El cambio cultural permite que las organizaciones cuenten con las herramientas necesarias para tener confianza por parte de sus empleados y así mejorar el ambiente. Sobre ese punto entran los líderes, quienes pueden ser los jefes u otras personas. Ellos deben ser ese canal de comunicación para que los trabajadores encuentren paz.

Por otro lado, es importante realizar una evaluación psicosocial de impacto. Para los expertos, luego de tener ese canal de confianza, es fundamental monitorear el estado de salud de los empleados en aras de tener un dictamen profesional.

Tener en cuenta la gravedad del deterioro es importante para evaluar los posibles efectos psicosociales de impacto y adoptar las mejores medidas para solventar el asunto.

Sobre ese punto, el tercer consejo revelado por los expertos es optar por la ayuda psicológica para los empleados. Dejarles a disposición el apoyo de psicólogos, ya sea de manera presencial, online o por teléfono; será un gran paso para gestionar su situación emocional.

Por otro lado, también es fundamental contar en la planta con embajadores internos de salud mental. ¿Quiénes son? Este grupo son empleados que han superado problemas de salud mental y pueden ser referentes para otros. Sus métodos pueden ser aplicados en otras personas y así ser de gran ayuda.

Finalmente, el cuarto punto radica en proporcionar medidas que promuevan la conciliación familiar y laboral. Ambos aspectos son fundamentales para cuidar el bienestar emocional de los trabajadores y las iniciativas articuladas sobre ello ayudará en el bienestar de los empleados. La participación activa es esencial, especialmente cuando va ligada por el acompañamiento.