Cómo
¿Cómo se cocina mejor la comida, con o sin tapa?
Los procesos de cocción dependen de cada alimento o preparación.
Cocinar de manera adecuada los alimentos es clave no solo para facilitar el proceso, sino también para conservar sus nutrientes y permitir que sea más saludable para el organismo.
En el desarrollo de esta actividad, una de las preguntas que, de manera frecuente, se hacen las personas, es si es mejor cocinar poniendo la tapa a los utensilios o no hacerlo. Sin embargo, para los expertos, esto es algo que queda a elección de cada persona, aunque es importante aclarar que hacerlo de una u otra forma modificará el sabor, la consistencia y el tiempo de cocción de cada plato, precisa el portal Sencillamente Delicioso.
Así las cosas, tapar una olla hará que al hervir mantenga la humedad, acelere el proceso de hervor y evite la evaporación. Lo que sucede es que cuando se utiliza una tapa, se reduce la vaporización del agua y la transferencia de calor, aumentando la tasa de ebullición.
En torno a este tema, el portal Gastrolab indica que cocinar con ollas y otros recipientes tapados brinda una serie de beneficios y en la lista se incluyen los siguientes:
- Acorta tiempos de cocción: Cocinar con la tapa acorta los tiempos que tardan en cocinarse los alimentos. Esto se debe a que si se tapan los utensilios cuando están sobre el fuego se crea una cámara de calor, lo que permitirá cocinar en un tiempo menor al que tomaría hacerlo sin tapa, lo que genera ahorro de energía o gas.
- Sabores y olores: El hecho de que el agua no se pueda evaporar permite que elementos como el aroma y el sabor permanezcan con más intensidad en la preparación; es decir, que se concentran sin perder humedad. Cuando el proceso de cocción se realiza sin tapa, lo más probable es que se deba agregar más agua y con ello lo que se hace es diluir los sabores de la preparación y es posible que en estos casos se requiera de condimentar más.
- Menor riesgo de accidentes: Al tapar la olla mientras se cocina es menos probable que las preparaciones ocasionen accidentes. En algunas oportunidades, es posible que al hervir la comida salpiquen líquidos en la estufa, dificultando la limpieza de la misma. De igual forma, al tapar el recipiente se evitan olores desagradables de productos como el ajo, el pescado u otros que suelen impregnarse en las paredes, la ropa, o el cabello.
Así las cosas, tapar la olla o no al cocinar se relaciona mucho con el gusto de quien ejecuta el proceso y del tipo de alimento que esté cocinando. Por ejemplo, dicen los expertos que la pasta es mejor hervirla con la olla destapada, evitando que se pegue y consiguiendo que se cocine más rápido.
Y si se quiere preparar una salsa boloñesa, lo indicado será cocinar a fuego lento sin la tapa para que reduzca e intensifique los sabores. Por el contrario, si la idea es preparar un estofado, lo aconsejable es hacerlo con tapa.
Por último, si se requiere mantener la humedad y cocer alimentos como el arroz, vegetales o caldos no tan espesos, lo mejor es hervirlos con la tapa puesta.