¿Cómo se debe regar una planta de laurel para que florezca?

El laurel es un arbusto de hoja perenne que durante siglos ha sido valorado por varias culturas debido a sus usos culinarios, medicinales y terapéuticos. De hecho, según el Feng Shui, este tipo de planta también se destaca por ser considerada como un símbolo de éxito y fortuna, atribuyéndole el poder de estimular el flujo económico en el hogar y el trabajo.

Plantado en tierra, esta hierba aromática podría alcanzar los dos metros de altura y se caracteriza principalmente por su olor. Lo único que se requiere para cultivarlo en casa es espacio, ya que no necesita de muchos cuidados. De esta manera, sería posible no solo disfrutar de su belleza, sino también de su aroma y propiedades beneficiosas para el organismo.

Aunque crece de manera lenta, para el laurel es fundamental contar con espacio para desarrollar sus raíces y así lograr lucir siempre radiante, sin que le lleguen directamente los rayos del sol, pero en un sitio iluminado. Por esta razón, se recomienda plantarlo en una maceta de por lo menos 30 cm de diámetro, según indica el portal Mi Casa.

Cuidados de la planta de laurel

Uno de los puntos claves para que conserve su vitalidad está en el riego, un paso que se debe hacer de manera moderada y un par de veces a la semana, especialmente si hace mucho calor y una vez a la semana cuando el clima esté más fresco. Para cuidarla sin fallar en el intento, estos son los pasos que se deben seguir, de acuerdo con el sitio UnComo:

1. Ubicar la planta de laurel preferiblemente en un espacio con semisombra.

2. Protegerlo en caso de que la temperatura esté muy baja para que sus hojas no se estropeen.

3. Plantarla en una maceta grande con un buen sistema de drenaje o ponerla directamente sobre el suelo del jardín o huerto.

4. El mejor momento para plantarla es cuando las temperaturas son más suaves, abonando bien la tierra con abono líquido de tipo orgánico.

5. El riego debe ser moderado, ya que por sus características el laurel se destaca en el mundo de las suculentas por su resistencia en la sequía.

6. En cuanto a la poda, es importante saber que este árbol es ideal para darle la forma que se desea y convertirlo en un elemento perfecto en la decoración del hogar.

7. A la hora de usarlo en la cocina, siempre es mejor elegir sus hojas más frescas.

Respecto al riego, una señal para identificar si se está haciendo de la manera correcta es el color de sus hojas, por lo que es indispensable tomarse el tiempo para observarlas detenidamente y poner fertilizante al agua cada 2 o 3 semanas.

Entre sus cuidados también es esencial prestarle atención a su abono, a la temperatura en la que se encuentra todo el tiempo y a la posible presencia de plagas para combatirlas de inmediato y así evitar que causen daños.