¿Cómo se usa la sal para proteger la casa?

Son muchas las personas que hacen uso de los rituales para tener ciertos beneficios, entre ellos atraer el dinero y la abundancia, encontrar el amor, e incluso, buscar la protección en general y hasta del hogar.

La sal es uno de los ingredientes más usados, pero se cree que tiene diferentes usos y finalidades. Por ejemplo, mientras unos aseguran que sirve para atraer cosas positivas, otros consideran que esto representa mala suerte y desgracia.

Este es uno de los ingredientes más usados en las cocinas, pues es clave para la preparación de diferentes platos, ya que es un buen potenciador del sabor, además de que permite conservar alimentos. Si bien los especialistas recomiendan moderar su consumo, se mantiene dentro de la lista de alimentos esenciales para las personas.

El sodio que contiene es necesario en el organismo para el correcto funcionamiento y equilibrio de músculos, fluidos corporales y nervios, pero la cantidad requerida para ello es muy pequeña.

Sin embargo, según el Feng Shui, técnica milenaria china que propende por el equilibrio de las energías mediante el uso adecuado de los espacios, este es un elemento fundamental para eliminar las energías negativas en un lugar. También se cree que tiene propiedades mágicas relacionadas con la expansión espiritual y por ello también se usa mucho en rituales.

De hecho, el portal Clarín precisa que “un puñado de sal gruesa en cada rincón de la casa y detrás de la puerta principal de ingreso” sirve para atraer la protección en el hogar. Luego, cuando haga efecto, debe ser barrida la sal desde el interior hacia la puerta; juntándola y tirándola en una maceta o lugar con tierra.

La puerta de ingreso a la casa es un punto crucial en el Feng Shui, ya que es por donde ingresa la energía al hogar. Para eliminar la mala vibra que pueda acumularse en este punto, la recomendación es colocar un pequeño recipiente con sal en el umbral de la puerta. Este elemento absorberá las energías negativas antes de que entren en la casa, permitiendo que el interior permanezca protegido y armonioso.