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Cuál es el significado, según la psicología, de tener un armario lleno de ropa que no se usa
Tener un armario lleno de ropa que no se usa es un fenómeno que va más allá de la simple acumulación.
La relación que una persona establece con su armario y las prendas de ropa que contiene va mucho más allá de la simple función de vestirse. Según diversas investigaciones psicológicas, el guardar ropa que no se usa o acumular prendas innecesarias puede estar vinculado a múltiples factores emocionales, psicológicos y conductuales.
Esta acumulación, que muchas veces se percibe como una cuestión de espacio y organización, tiene implicaciones más profundas que reflejan el estado emocional, las inseguridades o las creencias de un individuo acerca de sí mismo, su entorno y el futuro.
Este comportamiento, que comúnmente se observa como una forma de acumulación, puede ser interpretado desde varias perspectivas psicológicas, entre ellas el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), la acumulación compulsiva, la necesidad de seguridad y control, así como las cuestiones de identidad personal y autoestima.
Según un estudio de la Universidad de California en 2016, la acumulación de objetos materiales, incluida la ropa, no es un fenómeno aislado, sino que se encuentra profundamente enraizado en la psicología humana. La investigación reveló que:
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“Muchas personas acumulan cosas como una forma de lidiar con la ansiedad, el miedo a la pérdida y la inseguridad, o incluso como una manera de mantener el control sobre su entorno. La acumulación de ropa que no se usa podría ser vista como una manifestación de un intento de aferrarse al pasado o a la sensación de que “algún día” se necesitarán esas prendas”.
En este contexto, tener un armario lleno de ropa que no se usa puede estar relacionado con una serie de sentimientos internos, como la nostalgia, el temor al futuro o el miedo a no ser capaz de aprovechar las oportunidades que puedan surgir. Las personas que experimentan este tipo de acumulación podrían estar intentando preservar un cierto ideal de su identidad o de su vida pasada, con la esperanza de que algún día volverán a necesitar esas prendas o se sentirán mejor con ellas.
La psicología del acumulador compulsivo
Por otro lado, estudio realizado por la Universidad de Boston sobre la acumulación compulsiva reveló que las personas que acumulan objetos tienden a experimentar una sensación de angustia y desesperación cuando piensan en deshacerse de ellos.
“En el caso específico de la ropa, esto podría estar vinculado con la percepción de que cada prenda tiene un valor sentimental, práctico o simbólico, incluso cuando no se utiliza. Esta tendencia podría ser el resultado de una experiencia de vida, como una pérdida emocional significativa, que lleva a la persona a intentar mantener un sentido de control y seguridad en su entorno inmediato”.
Adicionalmente, es importante resaltar que, este trastorno puede estar asociado a la baja tolerancia a la incertidumbre, lo que provoca que la persona acumule objetos como una forma de “prepararse” para cualquier eventualidad. En el caso de la ropa, esto se traduce en la creencia de que algún día esas prendas serán útiles, a pesar de que no se usen en el presente.
