Cómo
El motivo por el que se forman gotas de agua dentro de la nevera; así puede solucionarlo
Algunas fallas recurrentes están asociadas con el mal uso del electrodoméstico.
El refrigerador es un electrodoméstico fundamental para garantizar la seguridad alimentaria, ya que se encarga de preservar los alimentos por más tiempo, evitando así el crecimiento de bacterias y posibles contaminaciones cruzadas que podrían resultar en intoxicaciones.
Es posible que en algún momento haya notado que su nevera gotea agua. Este fenómeno, bastante común, no debe pasarse por alto porque puede tener implicaciones importantes.
Existen diversas razones detrás de este problema, pero generalmente ocurre debido a una diferencia de temperatura entre el interior y el exterior del refrigerador, lo que se conoce como “condensación”. Esto sucede cuando el aire frío del interior se escapa y el aire caliente del exterior entra al abrir y cerrar la puerta.
Aunque es una experiencia común para muchas personas, es importante tener en cuenta que si no se toman medidas a tiempo, la nevera podría sufrir daños que no solo afectarían su funcionamiento, sino también la salud. La formación de moho es una de las principales preocupaciones al contaminar los alimentos, haciéndolos inseguros para el consumo.
¿Cómo evitar la condensación en la nevera?
Para abordar este problema, los expertos recomiendan evitar colocar alimentos calientes en la nevera. Es crucial ubicarla en lugares secos y frescos, alejados de fuentes de calor como estufas o ventanas expuestas al sol.
Además, es importante verificar regularmente que las juntas de las puertas funcionen correctamente. Si no lo hacen, la nevera no cerrará adecuadamente, lo que puede causar daños y aumentar el consumo eléctrico.
No se debe pasar por alto la limpieza, puesto que es un método efectivo para prevenir la formación de condensación. Para ello, es recomendable desconectar el electrodoméstico, retirar todas las bandejas del interior y limpiarlo con una solución de agua tibia y detergente líquido suave. Se puede utilizar un paño suave para secar y eliminar cualquier exceso.
La temperatura óptima para evitar este tipo de problemas en la nevera es de entre 1 y 4 grados, mientras que en el congelador debe ser de -18 grados. Es importante asegurarse de que no haya juntas rotas o dañadas que puedan estar relacionadas con la presencia de goteo.