El sencillo truco para que los alimentos se conserven por más tiempo en la nevera

En el agitado ritmo de la vida moderna, la conservación de los alimentos es una preocupación constante para cualquier hogar. No solo se busca reducir el desperdicio de comida, sino también mantener la frescura y los nutrientes de los alimentos durante el mayor tiempo posible. Un sencillo truco puede marcar la diferencia en la vida útil de los productos almacenados en la nevera.

El truco para prolongar la frescura de los alimentos cuando están dentro de este electrodoméstico es muy sencillo y no requiere tecnología avanzada ni ingredientes especiales. Simplemente se trata de combinar el uso de papel de cocina y recipientes herméticos de la manera correcta. Este método es simple y económico, y puede implementarse fácilmente en cualquier hogar.

El papel de cocina actúa como un absorbente de la humedad, que es uno de los factores que acelera la descomposición de los alimentos, especialmente frutas y verduras. Al envolver ciertos alimentos en este papel o colocar una hoja en el fondo de los recipientes, puede reducir la cantidad de humedad que está en contacto directo con los alimentos, prolongando así su frescura.

Por otro lado, los recipientes herméticos ayudan a aislar los alimentos del aire exterior, ralentizando la oxidación y la proliferación de bacterias. Estos objetos crean un microambiente controlado, manteniendo la temperatura y la humedad en niveles óptimos para la conservación de diferentes tipos de alimentos.

Paso a paso de cómo implementar el truco

Implementar este truco es fácil y solo requiere unos pocos pasos:

1. Frutas y verduras: Lave y seque bien las frutas y verduras antes de guardarlas. Envuelva cada pieza en papel de cocina y colóquela dentro de un recipiente hermético. Alternativamente, puede forrar el fondo del recipiente con papel de cocina antes de colocar los alimentos. Esto ayudará a absorber el exceso de humedad y mantener la frescura por más tiempo.
2. Carnes y pescados: Si compró carne o pescado fresco, lo ideal es guardarlos en la parte más fría de la nevera. Envuelva cada porción en papel de cocina para absorber los jugos y luego coloque los alimentos en un recipiente hermético. Recuerde consumir estos productos dentro de los tiempos recomendados para evitar riesgos a la salud.
3. Hierbas frescas: Las hierbas frescas como el cilantro, el perejil o la albahaca también se benefician de este método. Envuélvalas en papel de cocina ligeramente húmedo y luego colóquelas en un recipiente hermético. Esto ayudará a mantener su frescura y aroma por más tiempo.
4. Quesos y embutidos: Estos alimentos también pueden durar más si se envuelven en papel de cocina y se guardan en recipientes herméticos. Para los quesos, es especialmente importante permitir que ‘respiren’ un poco, por lo que no cierre completamente el recipiente.

Beneficios adicionales de una buena organización en la nevera

Además de utilizar el truco del papel de cocina y los recipientes herméticos, una buena organización de la nevera también contribuye a la conservación de los alimentos. Mantener una nevera ordenada no solo facilita el acceso a los productos, sino que también permite una mejor circulación del aire frío, lo que es crucial para mantener los alimentos frescos.

1. Ordene según la temperatura Los diferentes estantes y cajones de la nevera tienen distintas temperaturas. Coloque los alimentos que requieren menos frío en los estantes superiores y los que necesitan más frío en los inferiores o en los cajones diseñados para carne y pescado.

2. No sobrecargue la nevera Una nevera sobrecargada dificulta la circulación del aire frío, lo que puede provocar que los alimentos no se conserven adecuadamente. Deje suficiente espacio entre los productos para que el aire pueda fluir libremente.

3. Limpieza regular Mantenga la nevera limpia para evitar que los restos de alimentos y líquidos derramados se conviertan en focos de bacterias. Una nevera limpia también ayuda a prevenir olores desagradables que pueden afectar a otros alimentos.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.