El truco para que los huevos no salten al freírlos: ¡olvídese del bicarbonato y el vinagre!

Karlos Arguiñano, uno de los chefs más famosos de España, cuenta con un truco infalible para evitar que los huevos salten o salpiquen aceite a la hora de freírlos y lograr que queden perfectos, evitando que la cocina termine siendo un desastre.

Este sencillo, pero poderoso, truco, permitirá disfrutar de un excelente manjar, ya sea como desayuno, el almuerzo o incluso en la cena y pueden estar acompañados de un buen pan para mejorar la experiencia.

Alrededor del mundo existen varias teorías sobre como hacer los huevos fritos sin que salpique ni una sola gota de aceite y no resultar quemado en el proceso.

El primer paso de este sencillo truco es ir en busca de un buen sartén, un elemento al cual no se le da la debida importancia debida, pero es la base para que el huevo no se queme.

El siguiente paso para lograr un huevo de lujo, es conseguir un muy buen aceite y es mejor usarlo nuevo, es decir, que no haya tenido otro uso o que no sea recalentado.

El siguiente ingrediente es el huevo, el que se convierte en protagonista, en aceite de oliva que debe estar caliento para que el huevo se cocine rápido. Un factor que se debe tener en cuenta es la temperatura, ya que el calor uniforme provocado por el sartén, puede provocar que el huevo explote.

De acuerdo a lo explicado por el chef Karlos Arguiñano, hay dos trucos para evitar esto. Por un lado, está la sal que se usa para absorber el agua que llega del huevo y que acaba en explosión y el otro elemento a tener en cuenta es la harina. Este producto se le pone al aceite y evitará que salpique, ya que la harina puede absorber el agua, de la misma forma que la sal, pero no afectará directamente el sabor del huevo.

Estos sencillos trucos se pueden poner en práctica con unos huevos fritos con patatas y jamón, un excelente plato de la gastronomía española.