Cómo
Estas son las frutas que nunca se deberían meter a la nevera
Puede que los alimentos se sequen por someterse a altas temperaturas.
Desde el momento en el que se adquieren alimentos, como las frutas y las verduras, es necesario aprender a mantenerlos en óptimas condiciones. Esto porque puede darse el escenario en el que varios de los productos se pudran y no puedan ser consumidos.
Uno de los electrodomésticos en los que se ponen gran parte de los alimentos es la nevera. Debido a la temperatura que tiene este aparato, puede que se conserven los productos naturales, en especial las frutas.
Sin embargo, pese a que algunas frutas se introducen dentro de la nevera, no todas deberían estar allí.
La relación de las frutas con la nevera
Acudiendo a recopilaciones del portal Cuídate Plus, en algunos casos, el hecho de meter varios productos alimenticios a la nevera evitan intoxicaciones. De igual modo, la temperatura fría se adhiere al término de la conservación.
De acuerdo con Beatriz Robles, tecnóloga alimentaria y dietista-nutricionista, si bien es cierto que el frío va de la mano con la conservación de los alimentos, tanto de frutas como verduras, ya que puede darse que por “temperaturas demasiado bajas empiezan a tener cambios metabólicos y en su estructura”, tampoco hay que dejar a un lado que no todos los productos deben permanecer en la nevera.
En efecto, es necesario saber cuáles son las frutas que, en la medida de lo posible, no deberían guardarse en una nevera, pues se prevé que las características y componentes de estos alimentos naturales no estén aptas para permanecer en altas temperaturas.
Las frutas que no van en la nevera
Teniendo en cuenta datos del blog especializado en climatización y hostelería, Fibraclim, como cada alimento tiene un comportamiento que depende de la temperatura en la que se encuentra, pues cabe decir que algunas frutas crecen en climas tropicales y se adaptan a esto, hay que saberlos preservar.
En ese orden de ideas, si se ponen algunas frutas al frío, “pierden su estructura en vez de mantenerse, deteriorándose mucho más rápido”.
Así las cosas, la recomendación de los expertos es evitar meter a la nevera frutas como las peras y las manzanas, ya que es posible que tiendan a secarse y, en consecuencia, pierdan el brillo y la suavidad de la cáscara con la que suelen elegirse en los supermercados.
Pero eso no es todo. En el caso de las verduras, también hay que tener en cuenta algunas consideraciones, como la de que tampoco se debería meter la cebolla a la nevera porque “se marchita con el frío y absorbe la humedad, al igual que las papa o el plátano”, según Fibraclim.
Por su parte, hay quienes sostienen la premisa de que la elección de las frutas o verduras que se guardan en la nevera depende del momento en el que se vayan a consumir. Entonces, una de las “normas” que siguen algunos es que los tomates deben quedarse por fuera porque si no no maduran.
A raíz del anterior argumento, la especialista Ruth García, gestora de proyectos del Colegio Oficial de Dietistas Nutricionistas de la Comunidad Valenciana (Codinucova), dice que “los tomates los podemos guardar en la nevera una vez que estén maduros”, de acuerdo con Cuídate Plus.
Antes de terminar, la citada gestora concuerda con la idea de que las papas y las cebollas deben ir fuera de la nevera, pero, pese a ello, hay excepciones de por medio. Por ejemplo, en el caso de las fresas, es común que estas frutas permanezcan dentro del electrodoméstico que produce altas temperaturas.
En adición, los frutos rojos en general, como arándanos, frambuesas, grosellas, moras y cerezas, son los que más afectaciones reciben por las altas temperaturas, de modo que suelen permanecer refrigerados.