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¿Cuál es el tiempo máximo que se puede tener el arroz en la nevera antes de que se dañe?
El arroz es un alimento popular en los hogares y, en ocasiones, quedan algunas reservas para el día posterior a su preparación.
Ya sea para el almuerzo o la cena, el arroz se ha consolidado como un alimento estrella en la gastronomía de los hogares. Se trata de un platillo sencillo y versátil que, a su vez, sirve como guarnición para otras preparaciones.
De acuerdo con información de la Fundación Española de Nutrición (FEN), el arroz es rico en almidón, el cual se compone de amilosa y amilopectina, siendo la proporción de cada una la que determina las características culinarias del producto.
“A mayor proporción de amilopectina, más viscosos y pegajosos estarán los granos entre sí. Tiene un pequeño aporte de proteínas (7 %), y contiene cantidades notables de niacina o vitamina B3 y vitamina B6. Sin embargo, en la práctica, con su refinamiento y pulido, se pierde hasta el 50 % de su contenido en minerales y el 85 % de las vitaminas del grupo B”, detalla la FEN.
En resumen, el arroz no solo es una opción perfecta para acompañar las comidas principales del día, sino que también cuenta con un notable valor nutricional. Por supuesto, en la ecuación participa el tipo de arroz que se haya preparado, pues en el mercado existe una amplia variedad (arroz blanco, arroz integral, arroz arborio, entre otros).
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¿Cuánto tiempo se puede almacenar?
Sin duda, entre más fresco el producto, mejor será su consumo, no solo en aspectos como el sabor, sino también en su seguridad sanitaria. En algunos casos, puede que una considerable cantidad de arroz quede en la olla. ¿Qué viene después?, la respuesta varía en función de las prácticas en cada hogar.
Mientras que algunos eligen desechar el producto sobrante, otros lo almacenan en la nevera para alargar su durabilidad. Así, guardan la reserva para recalentarlo en otro punto de la jornada. No obstante, una duda común tiene que ver, precisamente, con cuánto tiempo aguanta el arroz en estado de refrigeración antes de que deje de ser apto para el consumo.
El tipo de arroz puede condicionar su durabilidad en la nevera, sin embargo, los tiempos de referencia no deben superarse por amplio margen. Sobre el arroz blanco, por ejemplo, se dice que puede durar entre tres y cinco días en la nevera, aunque lo ideal es consumirlo durante las 48 horas posteriores a su preparación.
Pero este tiempo no se cumple en todos los casos. El instinto de cada persona juega un papel clave, en ese sentido, si el arroz comienza a emanar un olor desagradable, lo mejor es desecharlo y no consumirlo. De igual manera, el cómo se haya almacenado inicialmente también puede incidir.
A manera de ejemplo, cuando se utilizan ciertas salsas en la preparación del arroz, es probable que su fermentación se acelere, por lo que presentaría cambios abruptos no solo en su olor, sino también en su sabor con el paso de un tiempo determinado.
Un cambio de coloración en el arroz también puede ser señal de una descomposición rápida. De ser el caso, consumirlo podría derivar en una intoxicación u otras reacciones contraproducentes en el organismo.
En resumen, frente al tiempo máximo de almacenamiento del arroz blanco en la nevera, lo más recomendable es no abusar y procurar que sea el mínimo.