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¿Qué es la educación nutricional? Cinco consejos de una experta para un estilo de vida saludable
Una buena educación nutricional ayuda a las personas a alcanzar un estilo de vida saludable y equilibrado.
La nutrición desempeña un papel fundamental para el correcto funcionamiento del cuerpo en la vida diaria, proporcionando la energía necesaria para un rendimiento óptimo y desempeñando un papel crucial en la recuperación y el bienestar general.
La falta de educación nutricional impacta directamente en las decisiones alimenticias diarias, especialmente en regiones como América, donde los índices de sobrepeso y obesidad superan los promedios mundiales. De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), “la región de las Américas tiene la prevalencia más alta de todas las regiones de la Organización Mundial de la Salud, con 62,5 % de los adultos con sobrepeso u obesidad (64.1 % de los hombres y 60.9 % de las mujeres). Si se examina únicamente la obesidad, se estima que afecta a un 28% de la población adulta (un 26% de los hombres y un 31% de las mujeres)”.
¿Qué es la educación nutricional?
La educación nutricional es un proceso educativo que tiene como objetivo mejorar los conocimientos, actitudes y prácticas relacionadas con la alimentación y la nutrición. Su objetivo es ayudar a las personas a tomar decisiones informadas sobre su alimentación y a mejorar su salud y bienestar general.
Ana Ávila, medical science liaison para Herbalife, resalta la importancia de adquirir sólidos conocimientos sobre nutrición desde temprana edad, estableciendo hábitos alimenticios saludables. Ávila destaca que la infancia es un momento clave para la formación de hábitos y gustos, previniendo así el desarrollo de enfermedades asociadas con malos hábitos alimenticios.
“Cuando no se tienen los conocimientos en educación nutricional, la toma de decisiones en la dieta es inadecuada, ya que en la mayoría de casos es basada en precios, sabores o marcas, lo cual puede tener consecuencias de salud a largo plazo. Por el contrario, cuando las personas son expuestas en edades tempranas a alimentos nutritivos, se creará un gusto por dichos alimentos, y se continuará con las mismas elecciones aún en su etapa adulta”, asegura la vocera experta.
En este contexto, la educación nutricional en las escuelas se presenta como una herramienta crucial, ya que, según Ávila, “ayudaría a que todos recibieran información adecuada, ya que en algunos hogares este tema se encuentra limitado”.
La experta de Herbalife desmitifica ideas equivocadas en el mundo de la nutrición, como asociarla únicamente con dietas para perder peso. Su mensaje es claro: “Necesitamos entender que la nutrición va más allá de las dietas para perder peso y abrazar una perspectiva más completa para llevar un estilo de vida saludable”.
Otro mito común abordado es la creencia de que “comer sano es caro”. Aunque los alimentos han experimentado un aumento de precios en América Latina, Ávila destaca que los costos asociados con enfermedades crónicas degenerativas a largo plazo son mucho más significativos. Priorizar una alimentación saludable, según la experta, es una inversión valiosa en la salud personal y colectiva.
Cinco consejos para integrar la educación nutricional
Ana Ávila ofrece cinco consejos prácticos para que las familias integren la educación nutricional de manera positiva en sus vidas:
- Variedad y equilibrio en la dieta: Una alimentación saludable debe incluir una variedad de alimentos de todos los grupos alimenticios, como frutas, verduras, granos enteros, proteínas magras y productos lácteos bajos en grasa. Buscar un equilibrio adecuado para obtener los nutrientes esenciales que el cuerpo necesita.
- Control de las porciones: Aprender a reconocer y respetar las porciones adecuadas para evitar el consumo excesivo de calorías. Utiliza platos más pequeños, masticar lentamente y prestar atención a las señales de saciedad para evitar el exceso de comida.
- Hidratación adecuada: El agua es esencial para la salud. Asegurarse de beber suficiente agua a lo largo del día. Limitar el consumo de bebidas azucaradas y alcohol, ya que pueden agregar calorías vacías a la dieta.
- Educación sobre etiquetas nutricionales: Aprender a leer las etiquetas de los alimentos para comprender la cantidad de calorías, grasas, azúcares y otros nutrientes presentes en los productos que se consumen. Esto ayudará a tomar decisiones más informadas al elegir alimentos en el supermercado.
- Actividad física: Un estilo de vida saludable no solo se trata de la dieta, sino también de la actividad física regular. Encontrar actividades que se disfruten es clave, ya sea caminar, correr, practicar deportes o hacer ejercicio en el gimnasio. La actividad física contribuye a mantener un peso saludable y a mejorar tu bienestar general.