¿Qué se les puede poner a las margaritas para que florezcan?

Las margaritas son plantas con flores pertenecientes a la familia Asteraceae, también conocida como Compositae.

Son nativas de diversas regiones del mundo y se encuentran en una amplia gama de hábitats, desde praderas y campos hasta jardines domésticos.

Las margaritas son populares en la jardinería debido a su belleza y facilidad de cuidado. Se utilizan en bordes y jardines de flores silvestres.

Para que florezcan de manera saludable y abundante, puede seguir estos consejos:

Luz solar: Asegúrese de que las margaritas reciban al menos seis horas de luz solar directa al día. Son plantas que aman el sol.

Riego adecuado: Riegue las margaritas regularmente, manteniendo el suelo húmedo, pero no empapado. Es importante evitar el encharcamiento.

Suelo bien drenado: Plantarlas en un suelo bien drenado ayuda a prevenir problemas de raíces. Si el suelo es pesado, considere agregar arena o materia orgánica para mejorar el drenaje.

Fertilización: Utilice un fertilizante equilibrado para flores, siguiendo las instrucciones del fabricante. Una alimentación regular puede ayudar a fomentar una floración abundante.

Poda: Elimine las flores marchitas regularmente puede estimular la producción de nuevas flores. También puede podar las plantas para darles forma y promover un crecimiento más vigoroso.

Control de plagas y enfermedades: Inspeccione regularmente las margaritas en busca de signos de plagas como pulgones o enfermedades. Trátelas con insecticidas o fungicidas apropiados si es necesario.

Temperatura: Las margaritas prefieren temperaturas moderadas. En climas muy cálidos, puede ser necesario proporcionar sombra parcial durante las horas más calurosas del día.

Otras plantas que puede poner en su jardín y que resisten mejor el calor

Claveles: Pocas plantas se adaptan tan bien a diferentes condiciones climatológicas y crecen con menos cuidados que el clavel. Son plantas que se adaptan muy buen al sol y por eso son muy apetecidas para hacer parte de los jardines. Además, poseen una gran variedad de colores y un aroma característico, el cual ayuda a crear ambientes muy agradables.

Geranios: Al igual que la Lantana, es muy agradecida cuando le da el sol y no requiere de mucho riego. Florece todo el año y tiene una variedad de tonalidades que hace ver hermoso cualquier jardín.

Lavanda: Impregna la terraza o el balcón de un aroma muy fresco y agradable, y sus colores embellecen cualquier terraza. Necesita mucho sol (unas seis horas al día) y basta con regarla un par de veces a la semana. A pesar de gustarle tanto el sol, resiste perfectamente las inclemencias del invierno y los cambios repentinos de temperatura.