Cómo
¿Qué sonido ahuyenta a las cucarachas?
Las cucarachas han desarrollado la capacidad de reconocer ciertos sonidos como señales de peligro inminente.
Las cucarachas son criaturas notoriamente adaptables y se guían principalmente por sus sentidos para sobrevivir en diversos entornos. Sorprendentemente, una de las características menos conocidas de estos insectos es su aguda sensibilidad a ciertos sonidos.
Sonidos que desencadenan la huida
Algunos sonidos, imperceptibles para los humanos, parecen tener un impacto particularmente negativo en las cucarachas. Estos incluyen frecuencias altas y pulsantes que simulan el sonido de los depredadores naturales de las cucarachas, como aves o roedores. Cuando las cucarachas perciben estos sonidos, su instinto de supervivencia se activa, y en lugar de enfrentarse a un posible peligro, optan por huir en busca de refugio seguro.
Este comportamiento puede entenderse desde la perspectiva de la evolución. Las cucarachas han desarrollado a lo largo de millones de años la capacidad de reconocer ciertos sonidos como señales de peligro inminente. Aquellas que han heredado esta sensibilidad acústica tienen más posibilidades de sobrevivir y reproducirse, transmitiendo este rasgo a las generaciones futuras.
¿Cómo emitir los sonidos?
Este descubrimiento tiene implicaciones significativas en el control de plagas. En lugar de depender únicamente de productos químicos tóxicos, la disuasión acústica ofrece una alternativa más segura y respetuosa con el medio ambiente. Dispositivos diseñados para emitir estas frecuencias específicas pueden ser estratégicamente colocados en áreas propensas a infestaciones, creando un escudo sónico que mantiene a raya a las cucarachas sin dañar a otras formas de vida.
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Sin embargo, hay quienes han optado para reproducir sonidos desde el celular simulando aves o ratones. Aunque no está científicamente comprobado, hay quienes aseguran que les ha funcionado.
Enfermedades que transmiten las cucarachas
Las cucarachas son portadoras de diversas bacterias y patógenos que pueden transmitirse a los humanos y provocar una serie de enfermedades. El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) destaca las siguientes:
- Salmonelosis: Las cucarachas pueden transportar la bacteria Salmonella en sus cuerpos y heces. La contaminación de alimentos y utensilios de cocina con heces de cucarachas puede llevar a la salmonelosis, una enfermedad gastrointestinal caracterizada por síntomas como diarrea, fiebre y vómitos.
- E. coli: También pueden transmitir la bacteria Escherichia coli (E. coli), que puede causar infecciones gastrointestinales y enfermedades relacionadas con alimentos contaminados.
- Infecciones respiratorias: Las partículas de alérgenos presentes en las heces, la saliva y las descamaciones de cucarachas pueden desencadenar problemas respiratorios y agravar condiciones como el asma.
- Sepsis: Aunque es raro, las cucarachas pueden ser portadoras de bacterias como Enterobacter, Klebsiella y Pseudomonas que pueden provocar infecciones graves, incluida la sepsis, si estas bacterias entran en el cuerpo a través de heridas o cortes.
- Alergias: Las cucarachas también son una fuente importante de alérgenos, y la exposición a sus partículas puede desencadenar reacciones alérgicas, especialmente en personas sensibles. Los síntomas incluyen picazón en los ojos, estornudos y problemas respiratorios.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.