Racionamiento de agua: ¿por qué se recomienda poner una botella con arena en el inodoro?

Ahora que ciudades como Bogotá y municipios aledaños a la capital debieron entrar en racionamiento de agua, debido al bajo nivel de los embalses generado por el cambio climático, se debe tomar conciencia más que nunca de la necesidad de ahorrar este preciado líquido.

El consumo de agua ha venido en aumento en todo el mundo, pero su disponibilidad va a la baja y por ello adoptar medidas sencillas desde casa es una forma racional de contribuir a cambiar ese difícil panorama. Hay diversas formas de hacerlo y una de ellas es haciendo un buen uso del inodoro; pues es allí en donde se gasta una buena parte del agua que se usa en el hogar.

La Fundación Aquae indica que más de dos tercios de este líquido que se utiliza en el hogar se usa en el baño y un alto porcentaje se esfuma cuando se descarga el inodoro. Se dice que los inodoros convencionales contienen de 10 a 16 litros de agua en el depósito y cada vez que se usan se desperdicia hasta el 60 % del líquido.

Por ello es recomendable adoptar trucos caseros que ayudan a minimizar ese gasto. Uno de ellos es colocar una botella llena de arena, de agua o de cualquier otro artículo pesado en el tanque del inodoro, pues esto permite ahorrar entre dos y cuatro litros de agua cada que se utiliza ese servicio. Poner este tipo de objetos permite que el tanque del inodoro se llene con menor cantidad de agua y de ahí que su consumo sea menor.

Otras formas de ahorrar agua en el inodoro

Los expertos indican que hay una serie de malos hábitos que se pueden cambiar fácilmente y que hacerlo llevará no solo a ahorrar dinero con la rebaja en el consumo de agua; además de contribuir con el ambiente, sino que también es una forma de mantener en buen estado el sistema de saneamiento público.

Por esta razón es importante entender que el inodoro no es un basurero y por ello se debe evitar echarle pañuelos, papel higiénico y otros desperdicios. Es una práctica muy habitual en algunos hogares, pero estos desechos deben ser arrojados a los contenedores adecuados. Cuando las personas tiran estas cosas en el inodoro, tienen la tendencia a descargarlo, sin que haya una verdadera necesidad.

Así las cosas, una forma de ahorrar agua es reducir el número de veces que baja el agua del inodoro, evitando hacer este proceso solo para desechar un papel, por ejemplo.

Con esta pequeña acción se contribuirá a reducir el número de litros de agua que se desperdician en un hogar no solo cada día, sino cada mes o año. El llamado es a tomar conciencia de la necesidad de ahorrar agua, lo cual puede hacerse con pequeñas acciones, que sumadas marcan la diferencia.