El encuentro de Timochenko y alias Sonia

“Esa mujer merece el más grande de los respetos y la expresión de una absoluta admiración”, así se refirió Timochenko, en su columna en la página web de las Farc, sobre su encuentro con Anayibe Rojas Valderrama, alias ‘Sonia’, la primera guerrillera extraditada por narcotráfico. Sonia había sido arrestada en Caquetá en 2004, acusada de participar en el envío de 600 toneladas de droga a Estados Unidos, lo que llevó a su extradición al año siguiente. El pasado 17 de agosto, Sonia fue liberada, regresó al país y se encuentra recluida en la cárcel el Buen Pastor, respondiendo por los delitos que tiene pendientes acá en Colombia. Allí fue donde tuvo su encuentro con Timochenko, a quien le contó detalles de lo que vivió durante los últimos 14 años y sobre la artrosis degenerativa que padece.

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En la columna, el entonces comandante de las Farc cuenta qué ocurrió después de que las autoridades capturaran a esta guerrillera y las estrategias que, según él, el gobierno de Álvaro Uribe usó para que testificara en contra de las FARC: “La tortura del aislamiento y la presión sicológica propias del fascismo”, dice.  

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Timochenko también confesó que nunca antes había tenido la posibilidad de conocer a Sonia y exalta en repetidas ocasiones su firmeza y temple, al punto de considerarla una verdadera revolucionaria. Revela que ella lo felicitó por el proceso de paz y el acuerdo realizado y, que al referirse a la soledad que sintió durante su tiempo en extradición, le reprochó: “la falta de una mayor solidaridad de las Farc”.

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