¿Puede ser el narcotráfico un delito político?

El presidente de la Corte Suprema, Leonidas Bustos, insiste en que no hay mandatos internacionales que impidan juzgar el narcotráfico como un delito político. En un conversatorio sobre derecho constitucional adelantado en el búnker de la Fiscalía, expresó que esos delitos sí pueden ser objeto de la justicia transicional si se cometen con el objetivo de financiar la confrontación armada. La posición de Bustos coincide con la jurisprudencia construida en Justicia y Paz que ha incluido el tráfico de estupefacientes en algunas de sus sentencias, siempre que se compruebe que el desmovilizado lo cometió como parte de las funciones dentro del grupo armado al que perteneció y no con el propósito de obtener lucro personal. Bustos, como el fiscal Eduardo Montealegre, intenta convencer a la opinión pública de que los guerrilleros de las FARC que hayan incurrido en narcotráfico podrían hacerle el quite a la extradición.