El mandatario entregó un balance de las conflagraciones en la capital del país.
Alcaldía de Carlos Fernando Galán pidió a la ciudadanía hacer donación para destinar recursos a los cerros orientales tras incendios forestales. | Foto: Semana

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Alcaldía Galán pidió a la ciudadanía donación voluntaria para proteger a los cerros orientales en Bogotá

Redacción Semana
29 de enero de 2024

Luego de los fuertes incendios que se presentaron esta semana en los Cerros Orientales de Bogotá, afectando la vegetación, los bosques y especies silvestres, la Administración Distrital del alcalde Carlos Fernando Galán, extendió una invitación a la ciudadanía para que realice sus donaciones voluntarias que se destinarán a realizar diferentes acciones para salvar los Cerros de la ciudad y ayudar a la población afectada.

De acuerdo con la Secretaría Distrital de Hacienda, periódicamente se rendirá cuentas a la ciudadanía sobre cómo se han invertido las donaciones.

Para donar se debe ingresar a la página web de la Secretaría, y en el home estará el botón de pagos para hacer la donación voluntaria.

La transferencia electrónica puede ser por cualquier monto y desde cualquier banco. No tiene ningún costo adicional.

“Ten en cuenta que las donaciones solo se pueden realizar de manera virtual y que esta es la mejor forma de ayudar en este momento. Bogotá nos necesita”, puntualizó la Secretaría de Hacienda.

Luego de las arduas labores para extinguir los incendios que azotaron por varios días los cerros orientales de Bogotá, el alcalde de la capital, Carlos Fernando Galán, dio a conocer cuáles fueron las causas que provocaron la emergencia que afectó más de 20 hectáreas de bosque.

El informe, realizado por el Grupo de Investigación del Cuerpo Oficial de Bomberos de Bogotá, pudo determinar que tanto en el cerro La Vieja, como en El Cable, las llamas fueron provocadas por el descuido y la irresponsabilidad de los visitantes.

Según Galán, quien leyó el informe levantado por los socorristas, una fogata y una botella de vidrio fueron las que desencadenaron esta emergencia, que terminó por afectar no solo a la vegetación nativa de los cerros orientales, sino a la calidad del aire de la capital.