Carnaval Hecho a Mano: la iniciativa que busca preservar la elaboración de trajes y disfraces para el Carnaval de Barranquilla

El Carnaval de Barranquilla, la fiesta cultural más grande de Colombia, tiene una nueva apuesta: preservar el desarrollo económico de los hacedores con la elaboración de trajes y disfraces hechos a mano.

Bajo esa consigna, Carnaval de Barranquilla, en alianza con la Fundación Santo Domingo, el Sena y la Fundación Visión Cultural, inauguraron el taller ‘Carnaval Hecho a Mano’.

El proyecto forma parte de una nueva era del Programa Adopte la Tradición, que pasó de entregar insumos a entregar vestidos completamente elaborados, beneficiando así a 30 confeccionistas que recibieron capacitación en el programa Tejiendo la Tradición.

‘Carnaval Hecho a Mano’ es un taller enfocado en el diseño y la confección que tendrá dos ciclos durante el año: de septiembre a marzo la elaboración de vestuarios para hacedores del Carnaval y de marzo a septiembre la producción de elementos de Carnaval de uso doméstico y corporativo.

La meta es que para 2024 se logren elaborar 1.200 vestidos a grupos folclóricos, los cuales contaron con un proceso de investigación para garantizar los patrones tradicionales de los trajes de las danzas y expresiones folclóricas del Carnaval.

“Desde hoy la tradicional Casa del Carnaval, el Museo de nuestra Fiesta y el Nodo de Industrias Creativas y Culturales del Sena tendrán un nuevo vecino: el taller ‘Carnaval Hecho a Mano’, espacio en el que, a través del diseño y la confección, se promoverá la salvaguarda de las tradiciones, se impulsará un oficio tradicional y se liderará un importante programa de proyección social y desarrollo económico, en el marco del Programa Adopte la Tradición”, afirmó Sandra Gómez, gerente de Carnaval de Barranquilla.

“Este es un hito importante para la Fundación Santo Domingo porque es la continuidad del proceso de fortalecimiento de las capacidades de nuestros hacedores. En este taller, 30 de ellos iniciarán un proceso productivo en el que tendrán la capacidad de atender las necesidades de diferentes grupos folclóricos, produciendo disfraces, tocados y adornos. Creemos que la creatividad y la cultura son una industria que puede generar ingresos y oportunidades económicas para nuestros hacedores, los 365 días del año. Nos soñamos muchos talleres como este, nos soñamos que los diferentes grupos tengan su propia capacidad productiva y que esta economía creativa del Carnaval comience a florecer”, expresó José Francisco Aguirre, director ejecutivo de la Fundación Santo Domingo.