Política

El candidato Gustavo Bolívar no les puso cuidado a sus opositores y participó de la movilización organizada por Gustavo Petro y el Gobierno

Redacción Semana
27 de septiembre de 2023
Gustavo Petro participó en las movilizaciones del 27 de septiembre.
Gustavo Petro participó en las movilizaciones del 27 de septiembre. | Foto: FOTO1: SEMANA/FOTO2: AUTOR ANÓNIMO.

El candidato a la Alcaldía de Bogotá Gustavo Bolívar no les puso cuidado a sus contradictores políticos, quienes le exigieron no salir en las movilizaciones este 27 de septiembre porque eran convocadas y financiadas por el Gobierno nacional, y participó de las marchas en Bogotá.

El líder del Pacto Histórico salió desde el Parque Nacional a las 9:30 a. m. y caminó hasta la plaza de Bolívar, el sitio que dispuso el Gobierno para el final de la concentración.

Bolívar marchó sin distintivos de su campaña, sin publicidad, sin vallas, ni pasacalles, tal como lo pidió él desde este martes 26 de septiembre, cuando les anunció a los bogotanos que saldría a respaldar las reformas estructurales del Gobierno.

Ese anunció generó ampolla porque él hoy es candidato a la Alcaldía de Bogotá y el Estado financió con más de 200 millones de pesos la tarima y el sonido que se utilizarían en la plaza de Bolívar. De hecho, con jurisprudencia en la mano, el senador del Centro Democrático Miguel Uribe le dijo en redes sociales que él no podía asistir.

“Ni Gustavo Bolívar ni ningún otro candidato petrista podrá participar de las marchas del Gobierno. Mucho menos estar presentes en las tarimas pagadas por recursos públicos. La Ley 996 de 2005 establece la prohibición de la utilización de recursos públicos para actividad política o proselitista”, afirmó Uribe.

Gustavo Bolívar, en diálogo con Red Más Noticias, aseguró: “Como me ven, no tengo ningún distintivo, vengo como un ciudadano a apoyar unas reformas por las que luché desde el Congreso, por las que sigo creyendo y aquí estoy. Le pedí a mi gente que no trajeran publicidad de la campaña”.

Los opositores al Gobierno creen que las movilizaciones, en el caso de Bogotá, se programaron un mes antes de las elecciones con el fin de darle oxígeno a la campaña de Gustavo Bolívar.