Gasolina en Colombia no subirá más en montos altos y para definir alzas en ACPM se intentará no provocar aumentos seguidos en fletes

En medio de las sombras que hay alrededor de la economía en este año, con cifras que suenan apretadas, podría haber un alivio al bolsillo de los colombianos, proveniente de los precios de los combustibles.

El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, al destapar el Plan Financiero para 2024 en el que revisa varios pronósticos, dijo que de aquí en adelante el precio de la gasolina queda flotando, queda fluctuando con los precios internacionales.

De esa manera, los incrementos en la gasolina, de producirse cuando aumente el precio en el exterior, ya no serán tan altos (de 400 y 600 pesos como se aplicaron el año pasado). Por mucho, serán alzas de 50 pesos.

Entretanto, está pendiente otro aumento, que es el del ACPM, teniendo en cuenta el alto déficit que se generó en el FEPC (fondo de estabilización de los combustibles), con el cual se financiaban subsidios al precio interno a todos los consumidores de gasolina y diésel. El hueco generado entre 2020 y 2023 era de 60 billones de pesos. En 2022 se pagaron 37 billones, confirmó Bonilla.

Al respecto, el funcionario manifestó que siguen en la tarea de dialogar y llegar a un acuerdo con los transportadores. Allí, el punto crucial es tratar de definir un incremento, de manera tal que no se llegue a provocar un incremento de fletes tan seguido. Con ello, se buscaría que tales alzas no afecten los componentes del mercado. Esto, teniendo en cuenta que el diésel, más que la gasolina, ejerce una mayor presión sobre los precios, ya que impacta el transporte de mercancías, pues ese es el combustible que utiliza el transporte de carga y de servicio público.