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“Lo saben la alcaldesa, usted y cualquiera”: ¿Por qué se molestó Enrique Peñalosa con la gerente del Acueducto de Bogotá?

22 de noviembre de 2022
Enrique Peñalosa
Enrique Peñalosa, exalcalde de Bogotá. | Foto: JUAN CARLOS SIERRA PARDO

El exalcalde Enrique Peñalosa expresó su malestar con la gerente de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB), Cristina Arango, por cuenta de la planta de tratamiento de aguas residuales (Ptar) Canoas, en el sur de la capital.

Arango, en su cuenta en Twitter, publicó: “El “dejamos listo” de Enrique Peñalosa es caso de estudio para la administración pública. Aquí seguimos tratando de salvar los grandes proyectos de la ciudad, que por “dejarlos listos”, estaban a punto de no hacerse”.

Asimismo, aseguró que la administración de Claudia López recibió el proyecto de la estación elevadora Canoas sin diseños detallados, con licencia ambiental rechazada y sin estructuración del proceso contractual, a la par que compartió que el proyecto hoy tiene un avance del 76 % y comenzará a funcionar el segundo semestre de 2023.

Pues bien a Peñalosa no le gustaron las palabras de la gerente de la EAAB y, en la noche de este 21 de noviembre, le respondió.

En primer lugar, el también precandidato a la Presidencia en las elecciones pasadas comentó: “Puede posar con su casco en la obra de la estación elevadora de Canoas, porque nosotros contratamos esa obra, que incluía diseños de detalle, construcción y puesta en operación. Eso lo saben la alcaldesa, usted y cualquiera que revise la información”.

Pero no se quedó ahí. Minutos después, mediante otro trino, Peñalosa añadió: “Con relación a la planta Canoas, usted sabe bien que dejamos el contrato de diseño de detalle firmado, que incluía el licenciamiento, muy avanzado en su ejecución. Dejamos cierre financiero y aportantes obligados. Cualquiera que investigue un poco lo puede comprobar”.

No es la primera vez que el exalcalde tiene diferencias con la actual administración de Bogotá. A Claudia López, por ejemplo, le cuestionó haber cambiado el color del Metro de rojo a verde, además de permitir que el consorcio chino encargado de las obras estudie la posibilidad de dejarlo subterráneo, aunque la sugerencia fue del Gobierno nacional, no de ella.