EDICIÓN IMPRESA

Vueltas de la vida

25 de junio de 2016

La canciller María Ángela Holguín fue clave en destrabar la etapa final de la negociación con las Farc en La Habana y en la organización del superevento oficial en que se hizo el anuncio. Esto llegó a  crear ciertas fricciones con los negociadores oficiales Humberto de la Calle y Sergio Jaramillo, ya que ellos tenían la ingrata tarea de negarle a la guerrilla muchas de sus desproporcionadas exigencias, y cuando se bloqueaba el proceso, la ministra de Relaciones llegaba como un bombero a apagar el incendio. Eso hizo que Timochenko, Iván Márquez y sus muchachos, quienes habían pasado su vida criticando a la oligarquía, acabaran fascinados con la distinguida y bella María Ángela, descendiente directa de la aristocrática dinastía de los Holguín.