“No estamos en contra del negocio de los hidrocarburos; necesitamos complementar la fuente de ingresos”: ministro de Minas

Muchos se están preguntando ya si el discurso del nuevo ministro de Minas, Ómar Andrés Camacho, es a favor de la continuación de los hidrocarburos en el escenario actual y de mediano plazo, o solo se trata de mensajes no tan claros para no espolvorear el avispero.

Aunque es evidente que hay un tono muy diferente al de la hoy exministra de minas, Irene Vélez, y de que el curso de la transición energética sigue, Camacho ha entusiasmado a muchos, pero también ha puesto a pensar a otros.

Desde los primeros días de su llegada al Ministerio de Minas, acudió al Congreso de la República, a enfrentar los debates de control político que venían en la agenda de su antecesora. En la Comisión Quinta de la Cámara de Representantes, por ejemplo, tuvo que responder por los incrementos en el precio de la gasolina y en ese estrado, dijo que en este gobierno, continuarían con la transición enérgética, pero con la industria del petróleo.

Muchos críticos celebraron el hecho de que se continuara pensando en exploración de petróleo y gas, como ha sido entendido el mensaje. Sin embargo, otros líderes de opinión en el país dudaron y prefirieron esperar a nuevos mensajes.

Pues bien, en el Congreso de Geología que tuvo lugar esta semana y que concluyó el viernes 18 de agosto, Camacho Morales volvió a expresar su posición. “No estamos en contra de los hidrocarburos”, dijo.

El ministro argumentó que la transición energética de la que hablan no se debe solo a temas de cambio climático, sino a la dependencia que tiene el país de los ingresos que aportan los combustibles fósiles. Por esa razón, expuso que “tenemos que cambiar las fuentes de ingreso. Nuestra estructura económica y productiva debe migrar a que otros segmentos de la economía respalden el desarrollo que requiere el país”.

Es decir, aún hay que escucharlo más.