CONFIDENCIALES
Lo que nunca se sabrá del caso Pizano
Parece que nunca se sabrá definitivamente cómo murieron Jorge Enrique Pizano y su hijo Alejandro. Las versiones conspiracionales sobre posibles homicidios están cada vez más descartadas. Además de las huellas de Pizano en el frasco de cianuro, varias personas aseguran que en su depresión les había dicho que prefería matarse antes de ir a la cárcel. De ahí se podría deducir que Pizano padre pensaba en suicidarse, pero antes de hacerlo le dio un infarto. La botella con el veneno que estaba en el escritorio indicaría lo cerca que estaba de cumplir esa decisión. Su hijo se la tomó por accidente. Esa interpretación a muchos les suena inverosímil, pero es la única sustentable hasta ahora con la evidencia forense.