"El cuerpo humano está hecho para vivir alrededor de 130 años": Carlos Jaramillo

SEMANA: ¿Cree que los malos hábitos han hecho que lleguemos a la vejez antes de tiempo?

CARLOS JARAMILLO: Desde que nacemos, hoy en día estamos expuestos en exceso a la mala alimentación, a los antibióticos, al azúcar, a los químicos, a la radiación, al teflón. Empezamos a acumular malos hábitos hasta que nos sobrecargamos, superamos lo que nuestro cuerpo puede soportar, y entonces el cuerpo se revienta antes de tiempo. Y llegamos a los 80 llenos de debilidades.

SEMANA: Quizá todos tengamos una idea de esa carga de la que habla, pero suena como algo etéreo. ¿Cuál es realmente ese peso que le ponemos al cuerpo para llevarlo a sufrir en la vejez? 

C.J.:  El cuerpo tiene una carga alostática que no es más que la capacidad de un individuo para responder ante agentes internos o externos. Esta es una respuesta natural que se llama alóstasis. Cuando se supera la carga alostática se empiezan a padecer enfermedades. 

SEMANA: Más allá de los agentes externos inevitablemente el cuerpo envejece, ¿cuáles son los aspectos más importantes que deberíamos entender para mejorar nuestra calidad de vida?

C.J.: El cuerpo humano está hecho para vivir alrededor de 130 años. Pero nos conformamos con 85. Para mí los tres aspectos clave del envejecimiento son: los cambios hormonales, el decaimiento del sistema inmune y la pérdida de masa muscular. 

SEMANA: ¿Podría explicar a grandes rasgos esos tres puntos? 

C.J.: La disminución de la testorena y de la producción de hormonas hace que las articulaciones y los huesos fallen. Luego está la disminución de la capacidad de respuesta del sistema inmunológico. A esto se le llama inmunosenescencia.

SEMANA: ¿Por esto es que los adultos mayores son más propensos a complicaciones de salud?

C.J.: Sí. Para hacerlo aún más claro, casi todos los hombres, cuando envejezcan, van a tener cáncer de próstata, pero ninguno se va a morir de esa enfermedad. El sistema inmunológico de una persona de 90 años tiene una respuesta inmunológica tan baja que el cáncer no avanza. El cáncer necesita una señalización de ese sistema para que las células se multipliquen. Puede que a un señor de 90 años le aparezca un cáncer, pero tendría que cuidarse más de un meteorito. 

SEMANA: Y finalmente está la pérdida muscular.  

C.J.: Que es clave. Cuando envejecemos se pierden los músculos. Pero la relación que tiene el músculo con el metabolismo, la movilidad, las articulaciones y el cerebro es muy importante. Crónicamente los seres humanos hemos diluido la proteína en la cantidad de carbohidratos y grasa que consumimos. Las personas no consumen ni el 70 por ciento de la proteína que deberían consumir al día y esta es necesaria para la piel, las articulaciones, los tendones, los músculos del corazón, el hígado, el corazón... todas son estructuras proteícas de soporte y sostén. 

SEMANA: A esas falencias nutricionales se suma la falta de ejercicio. 

C.J.: Así es. El ejercicio no es algo que haga la gente para verse bonita. El cuerpo necesita el ejercicio, necesita estar estimulado. Así ya tenga 70 años, hay que empezar a hacer ejercicio con peso, esto es lo que forma músculo. Y entre más músculo se tenga, menos necesidad tiene el cuerpo de formar grasa, y más controlado está el metabolismo, la glicemia y las hormonas de las que depende el metabolismo (la insulina). Si yo tengo controlados mis músculos, el riesgo de generar diabetes, por ejemplo, es prácticamente nulo.

SEMANA: ¿Qué hacemos con la inmunosenescencia?

C.J.: Cada uno debería volverse experto en su propia alimentación. Conocer por qué cóme y con qué lo balancea. Y hay que balancear la alimentación con una buena higiene del sueño y controlar el estrés. ¡La meditación y la relajación no es una religión, es una necesidad!.

SEMANA: ¿Cómo mantenerse vitales por más tiempo?

C.J.: Casi que si uno aprendiera a alimentarse bien, a dormir, a tener buen sistema de relajación y a hacer ejercicio, a lo largo de la vida podría activar todo el potencial que está dentro para tener vitalidad por más años. Para mí longevidad no es ser anciano por más años. Es ser joven por más tiempo.

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