El Politécnico Grancolombiano apoya a universidades y colegios a dar el paso hacia la virtualidad

Hace 13 años, a partir de una alianza con la red ILUMNO, el Politécnico Grancolombiano comenzó su transformación hacia la educación virtual, convirtiéndose en una institución pionera en el país. De los 6.500 estudiantes matriculados en ese momento, ha pasado a tener 55.000. De ellos, 44.000 están en la modalidad virtual, distribuidos en 22 programas de pregrado y 12 programas de posgrado. Hablamos con el secretario general de la universidad, Billy Escobar, para conocer cómo la institución está poniendo al servicio de la educación del país su experiencia.

SEMANA: ¿Cómo describe la transición de la educación presencial a la virtual?

BILLY ESCOBAR: El proceso de pasar de la presencialidad a la virtualidad no es un proceso de generación espontánea. No es prender un aparato. La educación virtual es un componente complejo que reúne muchos factores: didáctico, pedagógico, el uso de herramientas tecnológicas, el acompañamiento del estudiante, entre otras. Es una construcción muy compleja que trae unas interacciones en tiempo real entre alumnos y docentes.

SEMANA: ¿Podrán las universidades adaptarse a tiempo a la modalidad virtual en el marco de esta emergencia?

B.E.: Ante esta pandemia global, la mayoría de las universidades del país están en dificultades. Por eso hemos puesto a disposición del sistema de educación nacional nuestras herramientas tecnológicas y nuestro saber académico para acompañar a las universidades y colegios que quieran hacer ese proceso de transformación, y así van a ganar el tiempo que nosotros tuvimos que invertir para llegar a donde estamos. En ese sentido, hemos tenido aproximación con más de cinco grandes instituciones, pero apenas estamos empezando.

SEMANA: ¿Por qué es importante aprovechar esta oportunidad para impulsar la educación virtual en un contexto como el colombiano?

B.E.: Con nuestra apuesta por la educación virtual reducimos los altos costos de la matrícula, la inequidad y las dificultades geográficas: tenemos estudiantes en 32 departamentos y 852 municipios. Y desde el punto de vista académico, la persona que está en la virtualidad es autónoma, lo que ofrece muchas ventajas. La realidad es que hoy las universidades deben hacer esta transformación si quieren permanecer. Hoy más que nunca, el sector educativo del país debe abrazar los retos que plantea el futuro y prepararse para integrar a su desarrollo herramientas innovadoras y tecnológicas.

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