Medellín, el Valle del Software

En 2013 The Wall Street Journal eligió a Medellín como la “ciudad más innovadora del mundo”, superando a grandes metrópolis como Nueva York y Tel Aviv. La distinción fue entregada en el concurso City of The Year, organizado por el periódico estadounidense y el conglomerado financiero Citigroup.

Aún hoy, siete años después, la capital antioqueña se confirma como un referente de creatividad e innovación nacional y global. El uso de inteligencia artificial para combatir la propagación del coronavirus la convirtió en el ejemplo continental de la lucha contra la pandemia. Por estos días la ciudad comienza a reactivar su economía y a superar la crisis social causada por el covid-19. El Plan de Desarrollo ‘Medellín Futuro 2020- 2023’, aprobado por el Concejo local el pasado 30 de mayo, será fundamental para lograrlo. Esta hoja de ruta llegó a feliz término después de 500 horas de debates y 448 de deliberaciones, contó con 345 participaciones virtuales por parte de la ciudadanía, y fueron necesarias 38 horas de estudio con sectores sociales, académicos, gremiales, culturales y ambientales para ponerla a punto. Después de ese esfuerzo, como lo dijo el alcalde Daniel Quintero, “la ciudad ya tiene un norte y una visión”. El mandatario señaló que “empezamos un proyecto de transformación sin precedentes y un plan para construir la Medellín del futuro”.

El presupuesto, como lo explica el secretario de Gobierno del municipio, Esteban Restrepo, es el más alto en la historia de la ciudad: pasó de 18,2 billones de pesos a 22,7 billones. Es el tercer plan más robusto del territorio nacional, solo superado por el de la Nación y Bogotá.

EL VALLE DEL SOFTWARE

Jorge Mejía, director del Departamento Administrativo de Planeación, advierte que “el enfoque fundamental será recuperar la economía y generar empleo, pero pensando hacia futuro. Queremos que Medellín se convierta en un Valle del Software”. La administración local creará un distrito de ciencia, tecnología e innovación y un centro de generación de empleo cualificado. Se busca que la tecnología pueda transformar positivamente la calidad de vida de los ciudadanos.

El plan de desarrollo impulsará transformación cultural y educativa para formar a los habitantes de la nueva capital de la montaña. Estos cambios requieren de grandes inversiones, por eso el presupuesto de la Secretaría de Cultura tuvo un incremento significativo, pasó de 311.153 millones de pesos a 411.153 millones; y los apoyos económicos para el sector educativo aumentaron 56 por ciento. Así mismo, más de 11.000 docentes recibirán capacitaciones para implementar las herramientas tecnológicas y se destinarán más de 2 billones de pesos para sus salarios y prestaciones sociales.

‘Medellín Futuro 2020-2023’ contempla muchas estrategias novedosas, como convertir la capital paisa en una verdadera ecociudad y así mejorar la calidad del aire. Se destinarán 4,4 billones de pesos para la sostenibilidad ambiental y la financiación del proyecto del Metro de la 80, una iniciativa de transporte eléctrico que conectará al noroccidente y al suroriente de la ciudad, lo que beneficiará a 179.600 habitantes cada día. Además, se tiene prevista la construcción de una gran ciclorruta que una a los municipios del Valle de Aburrá.

CAPITAL SOCIAL

Otro de los objetivos fundamentales de la Alcaldía medellinense es erradicar el hambre y la desnutrición. Con este fin se fortalecerá el programa Buen Comienzo, que brinda una educación inicial y promueve el desarrollo cognitivo de niños y niñas durante los primeros cinco años de vida. A ese esfuerzo se suman una serie de acciones que favorecerán a las poblaciones más vulnerables. El plan de desarrollo dispone de 364.000 millones de pesos para la renta básica de estas familias y para impulsar a la microempresas y a pequeños emprendimientos.

Finalmente, puntualiza Quintero, se trabajará en la adecuación de nuevos hospitales, en mejorar la infraestructura de las instituciones de educación superior y en la ampliación del espacio público en las zonas del norte de Medellín. Si todo funciona según lo previsto, la capital paisa se convertirá en el Valle del Software, en un territorio de energías limpias y seguirá consolidándose como epicentro de la innovación y las buenas ideas. La ‘City of the Year’, será la ciudad de los sueños.

Lea también: El valle sostenible de Antioquia